Aristóbulo es un carterista fino colombiano que lleva bastantes años eludiendo la acción de la Policía y dedicándose a la lucrativa actividad de trabajar bolsos y bolsillos ajenos. El pasado martes fue sorprendido en Zaragoza cuando acababa de limpiar a una mujer en la línea 32 del bus urbano.

Fue otro usuario quien alertó al pasaje de la presencia del carterista. La víctima ni siquiera advirtió que le habían abierto el bolso. El conductor del vehículo dejó cerradas las puertas y avisó a la Policía Local, que detuvo al delincuente y lo trasladó a la comisaría de Centro.

Como ocurre con los carteristas suramericanos, Aristóbulo es muy supersticioso y se hace acompañar siempre por un tropel de amuletos que hasta ahora la habían dado suerte.

En su billetero, el de su propiedad, los policías encontraron un diente de ajo, una herradura, un crucifijo, y una medalla con una hormiga y la inscripción "suerte para el trabajo", en alusión al que realiza grano a grano con hurtos de pequeñas cantidades de dinero que, al final, hacen granero . Llevaba también otros fetiches que le proporcionaban seguridad y firmeza en sus actividades delictivas.

El martes le fallaron las estampas , pero hasta entonces habían sido efectivas, ya que está en Zaragoza desde el pasado día 7 y en este tiempo había levantado no menos de 20 carteras sin ser descubierto. Incluso llevaba un bonomés que había sustraído previamente y al que había cambiado la foto original por la propia.

Aristóbulo, que tiene 52 años y está casado con una española en Barcelona, era más torpe de joven. Entonces fue detenido hasta en 11 ocasiones, pero llegó a perfeccionar su técnica de forma considerable y llevaba mucho tiempo cosechando carteras sin ser molestado por los guardias.

El delincuente, que utilizaba un envoltorio de paquetería como muleta para ocultar los movimientos de su mano mientras actuaba y un destornillador para abrir los bolsos, ya había sido identificado por su actividad en las Fiestas del Pilar de los últimos años, pero las fotografías de su ficha policial eran de cuando aún no le crecía la barba. Tras su arresto en Zaragoza, se han actualizado.