Los vecinos de la calle García Arista, en el Arrabal de Zaragoza, llevan días preocupados por el estado de una caja de luz a la que le falta la tapa. En su interior, hay varios cables por los que circula la electricidad y los habitantes de los inmuebles cercanos temen que los niños puedan acercarse al poste y sufrir daños. "Hay un ratón muerto justo al lado de los cables, debió de trepar por la pared y al tocarlos murió electrocutado", explicó un vecino. Esperan que en los próximos días se coloque la tapa de protección. Por otro lado, esta misma vía se corta hoy al tráfico para ejecutar unas obras.