Alrededor de medio centenar de personas se ha concentrado este domingo en el centro de Cadrete para protestar por la retirada del busto de Abderramán III de la plaza de Aragón de localidad. El equipo de Gobierno municipal, liderado por la popular María Ángeles Campillo, que gobierna con el apoyo de Ciudadanos y Vox, ordenó el lunes pasado retirar la efigie por exigencia del partido de ultraderecha, siendo esta una de las primeras medidas del consistorio (si no la primera) tras la constitución de los ayuntamientos, el 15 de junio.
La retirada del busto ha levantado una gran polvareda durante toda la semana e Izquierda Unida en Cadrete, con María Ángeles Mercader a la cabeza, ha promovido este domingo una concentración de protesta ante lo que la formación considera una "gravísima e intolerable actitud racista y de odio". El busto, obra del escultor turolense Nando Ortiz, se encuentra actualmente en la tercera planta del edificio consistorial en espera de ser trasladado al castillo de Cadrete, ubicación que Vox considera más adecuada para su exhibición.
Izquierda Unida considera que su traslado al castillo es un "despropósito", ya que la falta de medidas de seguridad del mismo lo dejarán a merced de la vandalización. Mercader ha advertido de que la "inquina" hacia esta estatua "por gente del entorno de los partidarios de Vox ha hecho que en dos ocasiones la estatua haya sido vandalizada".
La primera vez fue arrancada con una eslinga, "hecho del que se vanagloriaron en redes sociales muchos partidarios de este grupo político" y en la segunda ocasión volcaron un bote de pintura roja sobre la estatua, ha relatado.
La coordinadora de IU en Cadrete avisa de que los próximos cuatro años van a ser "muy oscuros para la tolerancia" en el municipio y ha transmitido su sensación "desagradable" ante "una completa intolerancia, falta de conocimiento de la cultura y la historia y ninguna sensibilidad ante el arte".
La historia del califa
El califa cordobés Abderramán III acampó con sus tropas el 9 de octubre del año 935 frente a la fortaleza de Cadrete con el fin de preparar el asedio a Zaragoza y doblegar a la familia de los Tuyibíes que se habían sublevado contra el Califato de Córdoba.
"El califa mandó construir lo que hoy es la Castillo de Cadrete para controlar el asedio a la ciudad y se edificaron el de Cuarte y María de Huerva", ha detallado Mercader, para quien este hecho forma parte de la historia de la localidad.
También Chunta Aragonesista (CHA) ha criticado la decisión. "Que la primera actuación de la alcaldesa haya sido retirar este busto da una idea de lo que va a ser su política de tierra quemada con la cultura de Cadrete", ha advertido el exconcejal de Cultura del consistorio, Fabio Pérez (CHA).
CHA Cadrete ha considerado que esta acción es "una muestra de la intolerancia y negación de la historia que va a llevar a partir de ahora, la actual alcaldesa del PP, gracias al apoyo conseguido con los votos de Vox y de Ciudadanos".
