La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas y desmantelado un grupo especializado en perpetrar robos con fuerza en viviendas habitadas, cometidos en seis provincias españolas, entre ellas Huesca y Teruel, y que tenía en Longares, 25 kilómetros de Zaragoza, su centro de operaciones. Se alojaban en una casa rural y allí fueron sorprendidos en plena noche por un grupo de acción especial de la Benemérita.

«La operación se desarrolló entre las seis y las siete de la madrugada del pasado 21 de febrero y la verdad es que nos vimos muy sorprendidos», señaló ayer una fuente del Ayuntamiento de Longares. «Los sospechosos llevaban ahí tres o cuatro noches y no habían llamado la atención por nada», añadió la misma persona, que precisó que el dueño de la casa rural no se alojaba en la vivienda donde tuvo lugar la intervención.

Lo que sí que había intrigado a los vecinos de Longares era que, en los días anteriores a la operación, «un coche normal no paraba de dar vueltas por las calles del pueblo». «Llamamos a la Guardia Civil, alarmados, y al decirles la matrícula nos respondieron que no nos preocupáramos, que todo estaba en orden», agregó el representante del consistorio.

Se trataba de un vehículo camuflado que seguía los movimientos de los presuntos delincuentes. "La madrugada que entraron en la casa hubo un gran revuelo entre los vecinos, pues fue algo como lo que se ve en los telediarios y en las películas de acción y no te lo acabas de creer", añadió el mismo portavoz municipal.

La subdelegada del Gobierno en Jaén, Catalina Madueño, y el teniente coronel Francisco José Lozano, jefe de la Comandancia de Jaén, informaron ayer de esta cinematográfica operación. Madueño explicó que hay cuatro detenidos, de nacionalidad albanesa, con antecedentes por hechos similares y que han ingresado en prisión preventiva por orden de un juez de la provincia de Zaragoza.

Campañas temporales

Por el momento, se les imputan una veintena de delitos cometidos en Huesca, Teruel, Madrid, Toledo, Navarra y Jaén. Todos ellos tienen en común haber sido llevados a cabo por una organización perfectamente organizada y jerarquizada cuyos componentes tenían mucha movilidad geográfica para realizar robos en distintas provincias, según señaló la subdelegada.

Los detenidos, con edades comprendidas entre los 35 y 40 años, se desplazaban en vehículos legales, a los que cambiaban la placa de matrícula en el momento de perpetrar los robos y una vez en su destino, se alojaban en casas rurales de localidades pequeñas, para no levantar sospechas.

Utilizaban esas viviendas como centro neurálgico de sus operaciones y en estas estancias cortas, aprovechaban para realizar las vigilancias de sus objetivos y cometer los hechos delictivos. La investigación comenzó en Madrid al descubrirse la presencia de un grupo sospechoso de perpetrar robos en viviendas unifamiliares en la comunidad. Sus integrantes, alguno de ellos ya conocido por los agentes, conformaban una célula que realizaba «campañas temporales» en nuestro país.

A principios de febrero, los investigadores detectaron que el grupo podría haberse desplazado a Andalucía, a la provincia de Jaén. Para acceder a las viviendas forzaban puertas o ventanas de las plantas bajas y una vez dentro se hacían con todo tipo de efectos de valor, principalmente piezas de joyería, relojes, pequeños electrodomésticos y dinero en efectivo.

La Guardia Civil realizó tres registros: en Valdemoro (Madrid), Seseña Nuevo (Toledo) y Longares. Los dos primeros lugares eran utilizados por los miembros del grupo de forma habitual para vivir y el tercero era su centro de operaciones. Los agentes intervinieron collares, pulseras, anillos, pendientes, relojes, dinero en efectivo, material informático y electrónico, documentos falsos, placas de matrícula falsificadas y herramientas y efectos que utilizaban en los hechos delictivos.

La investigación fue desarrollada por el Grupo de Delincuencia Organizada de la Comandancia de Madrid y la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Jaén, bajo la dirección del Juzgado de Instrucción número 3 de Andújar, que decretó el ingreso en prisión.