La Guardia Civil ha desarticulado una organización delictiva especializada en robos en casas habitadas y ha detenido a nueve personas, de entre 18 y 45 años, a las que se atribuyen 62 delitos en diez provincias, entre ellas Teruel, y la obtención de más de 200.000 euros de los robos.

Las investigaciones comenzaron en mayo del 2018 tras detectarse varios robos en las localidades de Almansa (Albacete) y Ayora (Valencia) y comprobar los agentes que seguían un patrón similar. La organización estaba compuesta por dos células relacionadas que actuaban en función de la envergadura del asalto, una asentada en la provincia de Castellón y la otra en la localidad madrileña de Valdemoro. Tras estudiar la zona, los autores de los robos se desplazaban a pie hasta el objetivo elegido y permanecían ocultos hasta el momento de llevar a cabo el robo.

Elegían domicilios ubicados en urbanizaciones aisladas y realizaban el asalto cuando en el interior estaban sus moradores, a los que amenazaban, intimidaban, retenían e incluso llegaron a agredir para obtener información de los lugares donde ocultaban las joyas y otros efectos de valor.