La caída de parte del alero del Colegio de Educación Infantil y Primaria Santo Domingo de Zaragoza, en la calle Predicadores, dañó cinco coches estacionados la pasada madrugada. Aparentemente fue por efecto de la lluvia y el viento. Por fortuna el colapso, en plena puerta principal, se produjo cerca de la una de la madrugada y ningún transeúnte pasaba por la acera. Como comentaban ayer por la mañana los vecinos de la zona, si llega a suceder a la hora de entrar al colegio, las consecuencias podrían haber sido catastróficas.

El Ayuntamiento de Zaragoza anunció una inmediata investigación sobre el desplome de los 25 metros de cornisa --según los Bomberos, 15 según el consistorio-- y el comienzo de las tareas de desescombro y reparación, mañana mismo. La revisión de los arquitectos descartó a priori cualquier problema estructural del edificio. De hecho, casi todos los alumnos del colegio recibieron clase ayer con normalidad, aunque entraron por la puerta de atrás, en el paseo Echegaray y Caballero. Los del centro de mayores la pospusieron.

Fuentes de Bomberos de Zaragoza, que acudieron tras el desplome a derribar las zonas inseguras del voladizo, apuntaron a la podredumbre de la madera por la lluvia y a la fuerza del viento, la pasada madrugada, como razones más probables del desplome en el Palacio de Villahermosa, del siglo XVI, la antigua cárcel de mujeres.

Ayer, desde el consistorio no pudieron precisar cuándo fue la última vez que se revisó el alero: en el 2010 acometieron una reforma de la cubierta del edificio y de la fachada, que se restauró, por un importe cercano a los 450.000 euros. Volvieron a revisarlas el pasado mes de septiembre. Según el concejal delegado del Plan Integral del Casco Histórico (PICH), José Manuel Alonso, las revisiones incluyeron el alero. Fuentes municipales lo negaron.

Por su parte, la asociación de vecinos Lanuza-Casco Viejo criticó a través de un comunicado el "deplorable" estado de conservación del colegio que causó el derrumbre. Algo que "nunca habría sucedido" si el Gobierno de Aragón "hubiera atendido los informes de sus técnicos que corroboran el estado del edificio", sostuvieron. El propio Alonso constató, tras su reunión con diversos técnicos, los problemas de filtraciones en las cubiertas del patio interior. El portavoz municipal del PP, Eloy Suárez, instó al ayuntamiento a revisar al menos los edificios catalogados.