Los vecinos del Arrabal y Jesús conocieron ayer el proyecto de urbanización de las calles Horno y Mariano Gracia que se pavimentarán con adoquines por estar dentro del primitivo ensanche medieval.

El concejal de Arquitectura, Agustín Martín, expuso estas actuaciones que también afectarán al callejón de Mariano Lucas, donde no se cambiará la pavimentación, sino que se recuperará el material existente por tratarse de un tipo de pavimento único que quedará como testimonio histórico.

Tras conocer el plan, que cuenta con un presupuesto de 416.000 euros, los vecinos realizaron a Martín algunas peticiones, como que se mantenga la barandilla de la calle Horno, donde existe una pendiente del 22, y se mostraron confiados de que las obras puedan empezar este año después del verano.