Las bodegas que se encuentran bajo el casco urbano de Vera de Moncayo, unido a las persistentes lluvias de los últimos días, han provocado que una calle que había sido recientemente reformada se hayan venido abajo. Tras el hundimiento de parte de la calzada del conocido como camino de las bodegas hace unos meses, el consistorio se encontró recientemente con el mismo problema en otra calle. Según explica la alcaldesa del municipio, Angelines Sánchez, el primer tramo hundido fue reconstruido hace unas semanas aunque, según la representante política, las obras no han tenido nada que ver con el nuevo derrumbe.

La calle se asienta sobre unas antiguas bodegas que han cedido con el agua provocando el derrumbe en el asfalto. En este sentido, la edil de Vera asegura que el informe de los técnicos señala que las bodegas requieren para su mantenimiento una proporción adecuada de humedad y evaporación y que esta relación se ha roto con un tiempo de sequía muy largo seguido de unas semanas de intensas lluvias. Por todo ello, el terreno ha cedido y la calle se ha hundido.

EVITAR NUEVOS DERRUMBRES Para evitar nuevos derrumbes, el consistorio de Vera de Moncayo ha llegado a un acuerdo con los más de 30 propietarios de las bodegas que se encuentran en esa calle para que cedan sus propiedades al consistorio. De esta manera, el ayuntamiento podrá dar una solución a toda la calle en conjunto. "Lo que queremos hacer es rellenar de tierra las bodegas, en su mayoría abandonadas, para dar la cimentación que requiere la vía pública".

El consistorio espera ejecutar esta obra a corto plazo. En el arreglo de los 20 metros hundidos en anterioridad, se invirtieron 30.000 euros. La alcaldesa asegura que con la decisión tomada se espera solucionar definitivamente el problema.