Un camión cisterna cargado con 30.000 litros de gasóleo volcó en la tarde de ayer en la rotonda de La Cartuja, junto a la nueva autovía de El Burgo de Ebro, en un tramo en curva que da acceso al desvío de Torrecilla de Valmadrid. En torno a 8.000 litros de la carga, altamente contaminante, se esparcieron por la calzada o se infiltraron en el talud próximo a lugar del vuelco, mientras que el chófer del vehículo, Enrique S. M., de 35 años, sufrió contusiones de carácter leve.

"En ningún momento ha habido riesgo de deflagración, pues el punto de inflamación del gasóleo está en 64 grados", comentó José Lasobras, que coordinó a los efectivos de Bomberos de Zaragoza que se desplazaron al lugar del accidente. Lasobras también quitó importancia al hecho de que parte del gasóleo hubiera caído a una zanja por la que pasa una tubería del gas, dado que el conducto no sufrió daños y los fluidos no entraron en contacto.

El accidente se produjo sobre las 15.30 horas, cuando el conductor del tráiler, de la marca Renault y con matrícula Z-2872-AT, perdió el control de su vehículo al tomar una curva.

CAUSA DEL ACCIDENTE El tráiler quedó volcado lateralmente en el carril izquierdo de la carretera, lo que obligó a habilitar un paso provisional para impedir que se produjeran retenciones a una hora en que se registraba un intenso tráfico industrial.

El camión, perteneciente a la empresa Repsol, provenía de los depósitos de la compañía en Monzalbarba y se dirigía a una planta de la misma empresa situada en la carretera de Torrecilla.

El vehículo carecía de la obligatoria carta de porte, lo que dificultó la identificación de las características de la carga.

Se ignoran las causas del accidente. "Los conductores de mercancías peligrosas están muy preparados", comentó un miembro de los equipos de rescate desplazados a La Cartuja. "Ha podido pasar cualquier cosa, desde que se le haya cruzado un coche hasta que le haya dado un mal rato".