La consejera municipal de Servicios Públicos y Movilidad, Natalia Chueca, ha presentado la campaña "Zaragoza no es un cenicero", que comienza este martes en diferentes soportes de prensa, radio, medios digitales y mupis en la vía pública con la finalidad de reducir la presencia de colillas en el suelo.

"Arrojar las colillas al suelo genera un importante daño medioambiental y de salud pública, aunque habitualmente no se es muy consciente de ello, al tratarse de un residuo 'a priori' pequeño", ha indicado Chueca.

Una sola colilla contiene más de 70 sustancias cancerígenas y contamina 50 litros de agua dulce y 10 de agua salada. Muchas acaban en los ríos de la ciudad y pueden llegar al mar. Además, representan el 40 por ciento de los residuos que se recogen en la calle por los servicios de limpieza pública.

Tanto los filtros como el humo de los cigarrillos contienen altos porcentajes de cadmio, un metal tóxico tanto para la salud como para el medio ambiente, por lo que algunos especialistas incluso recomiendan su tratamiento como residuos peligrosos.

Aunque la ordenanza municipal de Limpieza Pública, Recogida y Tratamiento de Residuos de Zaragoza sanciona --artículo 19-- arrojar en la vía o espacios públicos "pequeños residuos" como las colillas, la realidad es que muchos fumadores mantienen la "mala" costumbre de tirarlas al suelo.

El objetivo de esta campaña, realizada en colaboración con FCC, es concienciar y educar sobre este problema en Zaragoza, así como sus consecuencias para la salud y para el medio ambiente.

La acción contará con la participación de la Asociación Profesional Provincial Autónoma de Expendedores de Tabacos y Timbre del Estado en Zaragoza. En los estancos de la ciudad se incorporarán pegatinas con el lema de la campaña, "Zaragoza no es un cenicero".

Colaboración ciudadana

Natalia Chueca ha explicado que desde el Ayuntamiento de Zaragoza se sigue trabajando para que la ciudad "esté más limpia y más cuidada". Para ello, ha incidido, es imprescindible contar con la colaboración ciudadana. "No se trata sólo de multar, sino también de concienciar a los zaragozanos sobre el daño que hacen al medio ambiente sin ser, a veces, conscientes de ello".

La consejera municipal de Servicios Públicos y Movilidad ha anunciado, además, que el próximo pliego de Limpieza y Recogida de Residuos, que se publicará este año, incluirá la renovación de todas las papeleras de la ciudad, las cuales deberán llevar incorporado un cenicero o un recipiente adecuado para este tipo de residuo.

Asimismo, ha recordado que la próxima Ordenanza Municipal Reguladora de la Instalación de Terrazas incluirá la obligatoriedad de que en todas las mesas de los veladores esté disponible un cenicero para que los fumadores no tengan excusa en depositar en él las colillas.

Esta campaña se suma a otras que ya se han realizado o están en marcha, como la que sensibiliza sobre la limpieza de los excrementos caninos, tanto sólidos como líquidos.

Los orines de mascotas también ensucian y, además, deterioran el mobiliario público. Desde el Consistorio se insiste en la importancia de no depositar basura fuera de los contenedores, ya que es un foco de atracción para plagas como roedores y cucarachas, o la importancia de no dar de comer a las palomas ni a otros animales en la vía pública, aspecto que será objeto de otra próxima campaña, ha avanzado.