El consejero de Hacienda realizó una primera intervención aséptica, centrada en las grandes cifras de las Plan Económico--Financiero (PEF). Pero en la segunda, tras las duras críticas de la oposición, se enmarañó en el debate político, con continuas alusiones --sin nombrarlo-- a Podemos y al supuesto nerviosismo de CHA e IU. Insistió en la idea, como ya había hecho en otras ocasiones, de que no se van a tocar los servicios sociales y sacó a colación la herencia recibida del PSOE: "Su Gobierno fue el menos transparente", le espetó a la socialista Ana Fernández.