El consejero de Hacienda y Administración Pública, Javier Campoy, ha confirmado que el Consejo de Política Fiscal y Financiera ha aprobado un incremento en los anticipos a cuenta a los diferentes gobiernos autonómicos, de los que entre "entre 100 y 150 millones" serán para Aragón en el 2015.

En declaraciones a los medios de comunicación en las Cortes de Aragón, que celebran un pleno, Campoy ha valorado que después de varios años de descensos en estos anticipos el aumento se sitúa en el orden del 5 por ciento para el próximo ejercicio, lo que va a permitir tener unas cuentas públicas "más saneadas" y "más ingresos para los servicios públicos de los aragoneses".

Por otro lado, no ha aclarado si va a mantener o modificar el tramo autonómico del IRPF, aunque ha recordado que Aragón es, junto con Madrid, la comunidad autónoma "de menor carga fiscal" y que quieren que "siga siendo así".

No obstante, el consejero ha matizado que tomarán una decisión tras la aprobación definitiva de la nueva reforma fiscal.

Sobre esta reforma, ha reiterado su valoración "tremendamente positiva" porque baja los impuestos "a la mayor parte de los ciudadanos" después de dos años "muy complicados".

"Hemos conseguido que no nos intervengan, hemos salido del riesgo del rescate, hemos salido de ese pozo en el que estábamos sumidos, precisamente por el descontrol de las cuentas públicas. Ahora ya se pueden bajar los impuestos a los aragoneses y a los españoles", ha manifestado.

Otra de las decisiones que ha destacado Campoy del Consejo de Política Fiscal y Financiera de ayer es la creación de un grupo de trabajo para "la racionalización, la mejora y la eficiencia" del gasto público autonómico.

Ha incidido en la necesidad de esta racionalización, poniendo "muchísima incidencia" en el estado del bienestar, la creación de empleo y la reactivación económica" y, en este sentido, ha puesto de manifiesto que Aragón ya lleva dos meses en esta tarea a través de la Unidad de Control del Gasto.

En cuanto a la reforma de la financiación autonómica, el consejero ha afirmado que "no está en el calendario" y que "ahora no toca", pero ha recalcado que el Gobierno aragonés seguirá demandando una "financiación adecuada para prestar los servicios a los aragoneses" distinta a la aprobada por el anterior gobierno socialista que, a su juicio, dejó a la Comunidad "descompensada" con el resto de España.

"Pido más ingresos para tener menos déficit, prestar mejores servicios a los aragoneses y para aplicar políticas de reactivación económica y de creación de empleo", ha reiterado.