La llegada de la crisis del coronavirus paralizó el sector ferial en la comunidad mucho antes de que el Gobierno decretara el estado de alarma y de que promulgaran el cierre de establecimientos comerciales, bares y, ahora, en el plazo de una semana, hoteles. Hace ya semanas que los establecimientos hoteleros reciben un goteo de cancelaciones por las grandes citas que no se van a celebrar en la comunidad, al menos, en las fechas inicialmente previstas. Unas cancelaciones que, según indicaron fuentes de Horeca, alcanzan a "casi el 100% de las reservas".

Feria de Zaragoza anunció, a principios de marzo y coincidiendo con la llegada de los primeros casos de contagios de covid-19 a la comunidad, que suspendían la celebración de Smopyc, prevista para la primera semana de abril, y que se desarrollará finalmente del 23 al 26 de septiembre. Después llegaron las suspensiones del Congreso de Periodismo Digital de Huesca, de varios congresos médicos y, también de las dos grandes ferias previstas para el mes de mayo, Aratur, el Salón Aragonés del Turismo, que pasará a celebrarse del 10 al 12 de octubre, y Stock Car, la feria del vehículo de ocasión, que se desarrollará del 26 al 29 de noviembre. Todas estas grandes ferias aglutinan, aproximadamente, más de 80.000 visitantes en Aragón.

Por ello, y dado que las ferias "se mantienen en el calendario, aunque en una fecha diferente", desde la institución ferial de Zaragoza indicaron que "estas suspensiones no han supuesto una pérdida económica reseñable". No obstante, reconocieron que el aluvión de eventos pospuestos y que se prevén celebrar a partir del mes de septiembre conllevarán una gran exigencia organizativa y de los recursos con que cuenta la feria, como también pueden acarrear dificultades a la hora de encontrar fechas disponibles en las agendas de los múltiples actores intervinientes.

A raíz de la suspensión de todos estos eventos, que mueven a miles de personas, quienes ya habían reservado sus habitaciones en establecimientos hoteleros, empezaron a cancelar sus peticiones. Según fuentes de Horeca, la caída del llamado turista congresual ha sido en estas semanas del cien por cien. No obstante, desde los hoteles se anima a los clientes "a no cancelar, sino posponer las reservas". En este sentido, las cadenas hoteleras son "flexibles", afirman desde Horeca, para reembolsar el dinero de la reservar y ofrecer disponibilidad en las nuevas fechas elegidas.

Según manifestaron desde la confederación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Aragón (Cehta), al igual que se ofrece total empatía con el cliente y flexibilidad en este momento y circunstancia extraordinaria, se confía que el grueso de estos visitantes pueda recuperarse próximamente tras el aplazamiento de importantes eventos, algunos ya con fecha prevista, como la Feria SMOPYC en Zaragoza, el Congreso de Periodismo Digital en Huesca o la Gala Nacional del Deporte en Teruel, por citar solo tres ejemplos.

Desayunos hasta la puerta

En estas semanas en las que el sector hotelero ha vivido la incertidumbre del cierre paulatino del resto de negocios y la implantación de las medidas de contención social e higiene, el día a día en los hoteles también ha tenido que adaptarse. Entre otras medidas destaca que los restaurantes no ofrecían servicio como tal a sus huéspedes, sino que los desayunos tan solo se servían en los dormitorios, y siguiendo con todas las medidas de higiene y distanciamiento previstas por el protocolo sanitario.