Cariñena celebró ayer la 51 edición de la Fiesta de la Vendimia bajo un sol radiante y con la certeza de que la cosecha, si bien será un 15% inferior a la del año pasado, tendrá una «excelente calidad», como subrayó el presidente de la denominación de origen, Ignacio Casamitjana.

Pese al mucho tiempo transcurrido desde que se instituyó esta fecha para exaltar el primer producto local, la de ayer no fue una jornada más. Por un lado, Casamitjana, que lleva pocos meses en el cargo, hizo su primera aparición pública. Y, por otro, concitó mucho interés el famoso periodista deportivo José Ramón de la Morena, que ejerció de mantenedor, firmó en el libro de honor de la denominación y dejó impresa la huella de sus manos en el cemento tierno del paseo del Vino y de las Estrellas, como manda la costumbre.

Por si fuera poco, la DGA se volcó con la fiesta y envió a la fiesta a tres consejeros: Vicente Guillén, de Presidencia; José Luis Soro, de Vertebración del Territorio, y Joaquín Olona, de Desarrollo Rural. Guillén pronunció unas palabras y afirmó que el cultivo del vino en un medio «contra la despoblación». «Plantar una cepa es plantar una nueva familia», subrayó el responsable de la Consejería de Presidencia.

PISADO DE LA UVA

El acto principal de la celebración, el pisado de la uva, se llevó a cabo en su escenario tradicional: la plaza de España. Y el nuevo vino, al terminar la ceremonia anual, brotó con fuerza por la fuente de la Mora, ante el asombro y la alegría de los centenares de personas concentradas para la ocasión. El mismo público llenaría poco después las casetas montadas en el paseo del Vino y de las Estrellas, donde se servían tapas y raciones acompañadas con caldos de la tierra.

El número del vino que mana de la fuente se instauró hace diez años, con ocasión de la presencia en la fiesta de los Reyes de España, explicó la periodista de televisión Lidia Sánchez, que se encargó de la presentación del acto.

LAS BODAS DE CANÁ

El pisado fue realizado por una joven pareja de joteros de Almonacid de la Sierra y, a continuación, se recogió el primer mosto del año para ofrecerlo en la capilla del Santo Cristo de Santiago, patrón de Cariñena.

Casamitjana, en su alocución, habló de la promoción a nivel internacional de la garnacha, la uva autóctona del Campo de Cariñena, abogó por actualizar el Museo del Vino y defendió una promoción común que agrupe en un mismo empeño a los viticultores y a las distintas bodegas.

José Ramón de la Morena, que actualmente dirige el programa El transistor en Onda Cero, hizo reír al público cuando tomó la palabra y contó que el origen del vino de Cariñena estaba en las bodas de Caná.

Durante la celebración en la plaza de España tuvo lugar la imposición de una insignia de platino a Antonio Uribe, el anterior presidente de la denominación de origen.