Dos grandes piezas de artilleria llenaron ayer de pólvora el ambiente de los municipios zaragozanos de Villar de los Navarros y de Herrera de los Navarros. La primera guerra carlista tuvo lugar de 1833 a 1840 y Aragón fue uno de sus principales escenarios. Fue precisamente en estos dos municipios, el 24 de agosto de 1837, donde los carlistas obtuvieron una de las victorias más trascendentes de la contienda, a los pies del santuario de la Virgen de Herrera. Por este motivo, unos 40 recreacionistas se han unido este fin de semana para conmemorar este hito histórico con la colaboración de la Asociación de Amigos del Museo Histórico Militar de Valencia, que proporciona los cañones y varias unidades de caballería.

Los actos, que se celebran por tercera vez en Herrera y por segunda en Villar, interesaron a un buen número de curiosos y visitantes de otras zonas de Aragón. Las representaciones teatrales de los principales momentos de la contienda interesaron a casi medios millar de asistentes. «La recreación se está consolidando y genera una gran expectación», indicó el asesor histórico Luis Negro Marco.

Los puntos de mayor interés fueron los campamentos de cada bando en las plazas de ambos pueblos, en los que se celebraron las actividades didácticas e infantiles. También hubo demostraciones bélicas durante el día. En ellas participaron por primera vez cuatro mujeres en el papel de vivanderas, una figura francesa precursora de las enfermeras bélicas. En tiempos se encargaban de proporcionar agua y vino a los combatientes para infundirles nuevos ánimos.

La batalla por aquel entonces se saldó con la victoria de los carlistas y 1.200 muertos, lo que permitió a las tropas de Carlos María Isidro llegar a Madrid.

Las actividades de divulgación cultural asociadas a la recreación también tuvieron un éxito notable. La presentación del cómic del dibujante Moratha congregó a muchos vecinos y la firma de ejemplares se extendió durante más de una hora y media. No se descarta que esta publicación pueda servir en un futuro como material didáctico en los colegios de la zona. «Está teniendo una aceptación tremenda», indicó Negro.

El cómic se ha financiado con aportaciones de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) y los Ayuntamientos de Herrera y Villar. Se han impreso 1.000 ejemplares, que se repartirán gratuitamente en ambos municipios.

Otro acto destacado fue la proyección de Gruneisen, un documental que cuenta la historia del primer periodista que narró una batalla desde el lugar de los hechos.