Las carreteras aragonesas registraron a lo largo de 2018 un total de 64 personas fallecidas en accidente (17 laborales), seis más que en el año anterior, debido principalmente al exceso de velocidad y al uso del teléfono móvil al volante.

Así se ha puesto de manifiesto hoy en el seno de la comisión autonómica de Tráfico, Seguridad Vial y Movilidad, que ha presidido la delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, y que ha contado con la presencia de las directoras generales de Interior y Trabajo del Ejecutivo regional, María Ángeles Júlvez y Soledad de la Puente.

Durante el transcurso de la reunión, el responsable de la Jefatura de Tráfico en Zaragoza, José Antonio Mérida, ha constatado, sin embargo, un descenso en el número de denuncias, de 316.000 en 2017 a un total de 263.000 a lo largo del año pasado.

Mérida, tras destacar que a lo largo de 2019 ya se han registrados 6 víctimas mortales, ha señalado que en 2018 se detectó un mayor incremento de los accidentes en vías de alta velocidad frente a los ocurridos en carreteras convencionales, de forma mayoritaria por exceso de velocidad o distracciones.

Las cifras aportadas revelan que un porcentaje entre el 20 y el 30 por ciento de las víctimas mortales u hospitalizadas eran personas mayores de 65 años, y que, en el caso de la provincia de Zaragoza, un 65 por ciento de los siniestros con fallecidos fueron provocados por este colectivo de edad.

Además, el 87 por ciento de los conductores fallecidos el año pasado fueron hombres, una cifra considerada "muy alta" por los responsables de Tráfico dado que del total de conductores registrados en Aragón, 450.000 son hombres y 350.000, mujeres.

Al objeto de tratar de disminuir la siniestralidad en Aragón, Mérida ha informado la organización, en las tres provincias de la Comunidad, de mesas de trabajo con los colectivos más vulnerables en la carretera, las personas mayores, los ciclistas y los motoristas.

También se van a promover grupos de trabajo relativos a la conducción de maquinaria agrícola en la provincia de Huesca, por ser el sector en el que se registró el año pasado un incremento de los accidentes de tráfico.

Las estadísticas aportadas indican que del total de víctimas mortales registradas el año pasado en las carreteras aragonesas, 33 fueron en Zaragoza, 23 en Huesca y 8 en Teruel.

Las carreteras aragonesas registraron a lo largo de 2018 un total de 64 personas fallecidas en accidente (17 laborales), seis más que en el año anterior, debido principalmente al exceso de velocidad y al uso del teléfono móvil al volante.

Así se ha puesto de manifiesto hoy en el seno de la comisión autonómica de Tráfico, Seguridad Vial y Movilidad, que ha presidido la delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, y que ha contado con la presencia de las directoras generales de Interior y Trabajo del Ejecutivo regional, María Ángeles Júlvez y Soledad de la Puente.

Durante el transcurso de la reunión, el responsable de la Jefatura de Tráfico en Zaragoza, José Antonio Mérida, ha constatado, sin embargo, un descenso en el número de denuncias, de 316.000 en 2017 a un total de 263.000 a lo largo del año pasado.

Mérida, tras destacar que a lo largo de 2019 ya se han registrados 6 víctimas mortales, ha señalado que en 2018 se detectó un mayor incremento de los accidentes en vías de alta velocidad frente a los ocurridos en carreteras convencionales, de forma mayoritaria por exceso de velocidad o distracciones.

Las cifras aportadas revelan que un porcentaje entre el 20 y el 30 por ciento de las víctimas mortales u hospitalizadas eran personas mayores de 65 años, y que, en el caso de la provincia de Zaragoza, un 65 por ciento de los siniestros con fallecidos fueron provocados por este colectivo de edad.

Además, el 87 por ciento de los conductores fallecidos el año pasado fueron hombres, una cifra considerada "muy alta" por los responsables de Tráfico dado que del total de conductores registrados en Aragón, 450.000 son hombres y 350.000, mujeres.

Al objeto de tratar de disminuir la siniestralidad en Aragón, Mérida ha informado la organización, en las tres provincias de la Comunidad, de mesas de trabajo con los colectivos más vulnerables en la carretera, las personas mayores, los ciclistas y los motoristas.

También se van a promover grupos de trabajo relativos a la conducción de maquinaria agrícola en la provincia de Huesca, por ser el sector en el que se registró el año pasado un incremento de los accidentes de tráfico.

Las estadísticas aportadas indican que del total de víctimas mortales registradas el año pasado en las carreteras aragonesas, 33 fueron en Zaragoza, 23 en Huesca y 8 en Teruel.