El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ha pedido hoy al Gobierno de España que "ponga orden en Cataluña" frente a la "kale borroka independentista" y aplique el artículo 155 para tomar el control, ha dicho, porque "Cataluña está fuera de sí" ya que "su Gobierno no controla la situación".

Así se ha manifestado en referencia a las imágenes de los disturbios registrados ayer en ciudades catalanes donde, a su juicio, el debate no es la "proporcionalidad" de la policía o el apoyo de la Consejería de Interior a la actuación policial.

El debate es "si se está garantizando que se cumpla ley y la convivencia en las calles", algo que en su opinión no se está haciendo, por lo que el Gobierno central tiene la responsabilidad de "poner orden" y hacer que "se cumpla la ley".

Casado ha hecho estas declaraciones hoy en un acto en Teruel en el que ha presentado a los candidatos del Partido Popular en las tres capitales aragonesas, así como al candidato al Gobierno de Aragón, y que da inicio a una gira por todo el Estado para presentar a los cabezas de lista en las próximas elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2019.

El líder del PP ha elegido Teruel como "kilómetro cero", en palabras del presidente del PP en Teruel Joaquín Juste, para la presentación de las candidaturas de la formación a las próximas elecciones municipales.

La ciudad sirve para ejemplificar la apuesta del PP, "municipalista y autonómica", por los candidatos aragoneses, ha dicho Casado.

"Aragón ahora significa muchísimo para los que creemos en una España unida, diversa, plural y cohesionada", ha sentenciado el líder nacional del PP, por su "historia tan grande pero tan indisociable al Reino de España", que es el punto de partida de lo que el Partido Popular quiere trasladar.

Ha defendido el valor de los candidatos aragoneses y en concreto de la importancia de Zaragoza que merece ser epicentro del Aragón que se enfrenta al "supremacismo de la querida vecina Cataluña".

Sobre la situación política de esta región, ha apremiado a que el Gobierno central aplique el artículo 155 porque, de no ser así, es "cómplice" de que no se cumpla la ley, y ha anunciado el compromiso de apoyo del PP en el Senado si decide aplicar este artículo.

Ha defendido las políticas propuestas por su partido para que "impere la cordura, la ley y la convivencia en Cataluña", porque a su juicio "esto no da más de sí", así que hasta que Sánchez tome la decisión de convocar elecciones, le ha apremiado a "tomar el control" en Cataluña, de los Mosos, de los medios de comunicación públicos y de la Hacienda pública, para "recuperar la legalidad".

Casado ha recordado las palabras del presidente de la Generalitat, Quim Torra, en las que decía que pensaba que Pedro Sánchez era "un hilo del que se podía tirar", un hilo "para ver si deshacían el jersey de la estabilidad política" y con ello romper "la igualdad de los españoles", ha añadido.

Al respecto, ha dicho que el PP ha pretendido "frenar ese deshilado" del país y ha defendido el papel del Partido Popular como opción de gobierno para recuperar la unidad y la estabilidad.

En este sentido, también ha criticado las propuestas de reforma de la Constitución planteadas por el Gobierno de Pedro Sánchez: "¿Es necesario abrir la Constitución con la que está cayendo en Cataluña?", se ha preguntado, y ha pedido que no se someta al país a un "debate doctrinario que ponga en riesgo" la estabilidad "solo por la debilidad del Gobierno".

En la misma línea, a Pedro Sánchez le ha reprochado que busque "entretener con los presupuestos" después del mal resultado para los socialistas en las elecciones andaluzas: "No puede ser que el Gobierno los utilice para alargar la estancia en Moncloa", ha enfatizado.

Tras los resultados de los comicios en Andalucía, Casado cree que la "legislatura está herida de muerte" y ha reprochado que las "vinculaciones y dependencias con secesionistas y batasunos son cada vez más sonrojantes" para el Gobierno, al tiempo que ha situado al PP como la "fuerza moderada, tranquila, sensata pero firme", para la que ha pedido la confianza de los españoles.