La campaña de vigilancia de velocidad llevada a cabo en Zaragoza durante el 31 de marzo y el 6 de abril ha concluido con un total de 493 denuncias y la aplicación del código penal a un conductor por rebasar en más de 60 kilómetros por hora el límite establecido en vía urbana.
En total se han controlado en la última semana, en colaboración con la Dirección General de Tráfico (DGT), 32.998 vehículos, un 44 por ciento más que el pasado año, según han indicado fuentes municipales.
Los resultados obtenidos confirman un alto cumplimiento de la ley de tráfico y la adecuación a los límites de velocidad en la capital aragonesa aunque se han detectado 493 infractores, un 1,49 %, de los que sólo a uno se le ha aplicado el artículo 379 del Código Penal, por conducir superando en 60 kilómetros por hora la velocidad permitida en la ciudad.
En este caso, el infractor se enfrenta a pena de prisión de tres a seis meses o a una multa de seis a doce meses o a realizar trabajos en favor de la comunidad de 31 a 90 días.
En cualquier caso, se le privará del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a un año y hasta un límite de cuatro.
Según las fuentes, una persona atropellada por un vehículo que circula a 50 kilómetros por hora tiene un 80 % de probabilidades de morir, mientras que si la velocidad del móvil es de 80 km/h, la posibilidad de un desenlace fatal alcanza el 100 %.
Por esta razón, la Policía de Zaragoza trata, desde la vigilancia, la información y la formación, de que se cumplan con rigor los límites que prevé la ley.
