Caspe espera la asistencia de unas 2.000 personas a los actos de recreación del Compromiso de Caspe, que alcanzan su vigesimosegunda edición con la participación de más de 300 vecinos, hasta un millar en algunos actos, en una cita que se ha ganado ser clasificada como de interés turístico en Aragón.
La programación fue presentada ayer en las Cortes de Aragón, cuyo recién nombrado presidente, Javier Sada, destacó que «no deja de ser un anticipo de lo que quiero que sean estas Cortes en esta legislatura, un lugar de pacto y de consenso». Así lo simboliza el acontecimiento histórico que se conmemora, en el que seis aspirantes decidieron quién ostentaría el trono de la Corona de Aragón tras la muerte sin descendencia del rey Martín I El Humano, en 1410.
La alcaldesa de Caspe, Pilar Mustieles, acompañada de los nueve compromisarios vestidos de época, invitó a participar de esta fiesta en la que Caspe lleva trabajando durante todo el año. Unos actos que comenzarán el viernes, con el pregón a cargo de la periodista Cristina Pardo, y continuarán el sábado y el domingo con un extenso programa repleto de actividades.
Este sábado, 29 de junio, tendrá lugar el acto central de la conmemoración con la elección del rey, en la plaza Compromiso a partir de las 23.00 horas.
La localidad zaragozana, de 9.800 habitantes, triplica su población durante estos días, lo que supone un gran impacto económico para la zona. «Caspe se colapsa y las plazas hoteleras se quedan cortas», afirmó la alcaldesa caspolina.
El coordinador de la recreación, el historiador Darío Español, indicó que este evento cumple con los tres criterios que se plantean en cualquier recreación de un hecho histórico: identifica la Historia y aporta pautas de reflexión sobre «quiénes y cómo fuimos», contribuye a divulgar y democratizar la Historia más allá de las aulas y genera un gran impacto económico y en la industria cultural del territorio.
Español valoró especialmente la implicación de los vecinos en la conmemoración, en la que participan 300 recreacionistas directamente y un millar en los desfiles y distintos actos, y precisó que todo está cuidado al detalle, como la vestimenta medieval de los actores, tejida a mano.
