El río Ebro continuará creciendo a su paso por Zaragoza de manera muy ligera hasta el mediodía para, posteriormente, mantener los caudales altos durante bastantes horas y bajar también lentamente.

La capital aragonesa continúa en alerta ante esta avenida, que se considera ordinaria, y que ayer a última hora de la tarde amenazó con desalojar la urbanización Torre de Urzáiz, situada en las proximidades del río, aguas abajo de Zaragoza, entre Movera y Pastriz, tras apreciarse el riesgo de desbordamiento de una mota de protección.

Finalmente, y tras una reunión mantenida entre técnicos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), el Ayuntamiento de Pastriz y efectivos de Bomberos y Policía Local, se decidió suspender el desalojo obligatorio de dicha urbanización, según informó el Ayuntamiento zaragozano.

Sin embargo, se cortó el acceso a varios caminos próximos al Ebro y, durante toda la noche, miembros de los Bomberos y de la Policía Local siguieron atentamente la evolución de los acontecimientos.

El río Ebro alcanzaba esta mañana los 4,38 metros de altura en la capital aragonesa, donde pasaba con un caudal de 1.543 metros cúbicos por segundo, según el Sistema Automático de Información Hidrológica de la Cuenca Hidrográfica del Ebro

Un caudal que puede repuntar muy ligeramente hasta el mediodía, han informado a Efe fuentes de la CHE, para después bajar muy lentamente, a lo largo de las próximas horas, y mantenerse con caudales altos durante un tiempo.