No quiero ser iluso», confesó ayer el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, durante su intervención en el pleno de las Cortes. De este modo y en referencia a la inversión para infraestructuras sanitarias, el consejero descartó que este año se vayan a poder destinar para obras los 50 millones de euros que serían necesarios anualmente y, en esta situación, el departamento tendrá que priorizar actuaciones.

Así, y en respuesta a una interpelación formulada por la diputada del PAR Berta Zapater, Celaya dijo que existe la prioridad «clara» de mantener «plenamente» operativas las instalaciones sanitarias ya existentes, pero evitó comprometerse. «Los recursos siguen siendo muy limitados, la financiación de la sanidad es claramente insuficiente y las inversiones deben anteponerse estrictamente según las necesidades», comentó.

En este sentido, fuentes del Departamento de Sanidad precisaron que el plan de infraestructuras presentado en noviembre del 2016 tiene una vigencia de cinco años, «pero no tiene un calendario fijado de obras, por lo que con menos dinero se tendrán que hacer las cosas a más largo plazo», añadieron.

Así, entre las actuaciones prioritarias que citó Celaya en su intervención están los hospitales de Alcañiz y de Teruel; los nuevos centros de salud de Los Olivos (Huesca), Broto, Binéfar y Zuera, así como las reformas en otros cinco.

También se dará preferencia a la planta de Psiquiatría del hospital Miguel Servet, la reforma de las urgencias del San Jorge, en Huesca, o la rehabilitación del pabellón San Juan del Centro Psiquiátrico de Nuestra Señora del Pilar.

Dicho documento de infraestructuras, «técnico y no político», según precisó Celaya, cuenta con unas necesidades presupuestarias de 50 millones al año, es decir, 250 millones en total

FÓRMULA DE HACIENDA / Para poder acometer estas obras ante la escasez presupuestaria, el consejero dijo que sería necesario que Hacienda «encontrara una fórmula de hacer que las inversiones no contaran como déficit», señaló.

El consejero recordó que los presupuestos de su departamento se incrementaron un 12% en el 2016 y este año subirán otro 6% para llegar a los 1.900 millones, cifra ya muy cercana a la del 2010, según expresó. Asimismo, insistió en los esfuerzos que ha hecho su consejería por contener el déficit, con solo una desviación en el 2016 en el capítulo I (personal) del 2% y del 0,5% en el capítulo II (gasto corriente).

Además, indicó que «antes de final de este mes» se anunciará la fecha en la que se abrirán los pliegos del concurso para hacer las obras del hospital de Alcañiz, con la idea de adjudicarlas en cuanto se aprueben los presupuestos de la comunidad.

Durante su intervención, Celaya aprovechó para precisar una serie de actuaciones ya finalizadas o tramitadas en infraestructuras sanitarias de obra menor como la mejora de la eficiencia energética en el hospital de Calatayud, el San Jorge, el centro de salud de Sagasta o el de Caspe.

En cuanto al mantenimiento, el consejero apuntó a actuaciones en el Infantil con el cambio de dos montacamas; al traslado del servicio de hemodiálisis en el Servet; el acondicionamiento de radiología en el centro de especialidades Pablo Remacha o al cambio del ascenso en el hospital de Barbastro.

Celaya también se refirió, en cuanto a proyectos finalizados, a la adaptación del plan sismorresistente en el futuro centro de Teruel, a la nueva unidad de farmacia del Servet o el nuevo laboratorio de Anatomía Patológica de este hospital.