El sindicato Cemsatse, que representa al personal médico y de enfermería en Aragón, convocó ayer finalmente una huelga general para el próximo 11 de abril a pesar del fracaso de sus paros sanitarios de los últimos meses, que apenas registraron seguimientos. Sus portavoces, Leandro Catalán, Merche Ortín y Pilar Navaz, entregaron en el Salud el escrito de convocatoria «tras la negativa de Sanidad a sentarse a negociar» sus reivindicaciones en este tiempo. «El Gobierno ha hecho oídos sordos y no nos han dejado otra salida», aseguró Catalán.

La convocatoria de huelga, a la que están llamada los 20.000 empleados del Salud de todos los ámbitos, se hace en plena campaña sindical de los colectivos, que celebrarán elecciones el próximo 28 de marzo. Un hecho no ha pasado desapercibido en el Salud, desde donde insisten en que sus peticiones son meramente económicas. «Claro que tienen un contenido económico, pero ellos como planificadores sabrán a qué quieren destinar los recursos de los aragoneses», dijo Ortín.

Cemsatse también invitó al resto de colectivos sindicales de la sanidad a secundar la jornada de huelga. «Desde que se fijaron los paros de 10 minutos no han contestado ni nos han llamado para aproximar posturas. Ya llevamos mucho tiempo advirtiéndolos», añadió Catalán. «Es un año el que llevamos pidiendo que se sienten y tener un acuerdo de mejoras laborales y retribuciones económicas», dijo. «Llevamos casi 12 años sin acuerdo sanitarios para los empleados del Salud. Nos merecemos que se regularice el tema salarial», reiteró Catalán.

DESORIENTACIÓN

Respecto al poco seguimiento que tuvieron los paros de 10 minutos en la sanidad, el portavoz consideró que la propia Administración «generó desorientación» con las cifras. «Ellos hablaban de un 10%, nosotros de un 40%. No se fijaron con anterioridad los servicios mínimos, las agendas de los médicos no se cerraron. Lo de menos son las cifras, sabemos que los compañeros apoyan nuestras peticiones. No queremos entrar a valorar las cifras», añadió Catalán, que solicitó «un apoyo masivo» para la huelga general.

«Hay una pasividad por parte del Salud para mejorar los temas, no solo retributivos. Hay problemas de plantillas, en la carrera profesional y demás. Hay que sentarse a hablar», matizó Navaz, presidenta de Satse.