La tradición de las cenas de empresa, en las que los trabajadores se reunían a celebrar la llegada de las navidades (o de las vacaciones), tras el bajón que ha tenido estos años de crisis, parece que está recuperándose, pero de otra manera, ahora pagan los empleados.

Un estudio realizado por la web eltenedor.es revela que comienza a recuperarse la costumbre de las cenas de empresa. No solo ha dejado de caer el porcentaje de encuestados que afirman que acudirán a una cena de este tipo, sino que ha crecido seis puntos respecto a 2013, llegando al 30%. Desde la Junquera, uno de los restaurantes zaragozanos que organizan estos eventos, suscriben el repunte, sin embargo aseguran que todavía "no es la alegría de hace siete u ocho años", que se gastaba más libremente.

Pero no han sido las empresas las que han decidido desempolvar la billetera y recuperar la motivación de sus empleados, los dueños de Casa Pedro afirman que "la mayoría de las cenas son a escote", es decir, que son los propios empleados los que han decidido recuperar sus alegrías.

Este mismo restaurante puntualiza también que "antes, cuando pagaba la empresa, se hacían cenas más espléndidas". Y obviamente esto se refleja en el precio del menú. El gasto medio en estas reuniones de empleados oscila entre los 25 y los 40 euros, cuando antes era normal subir de 60 euros, con la cada vez menos frecuente barra libre. Son precisamente 25 los euros que cuesta el menú estrella del restaurante La fábula que, aunque abrió en septiembre de este año y no puede comparar con el año pasado, está teniendo muy buena aceptación entre el público.

FACTORES EN LA ELECCIÓN

Revela la encuesta que los factores más determinantes, aparte del precio, son el tipo de ambiente, el servicio y las opiniones y recomendaciones. Aunque, según afirma el encargado de La Junquera, ante la desaparición de las barras libres, otro factor que acaba decantando a la hora de elegir restaurante es la localización. Concretamente se tiene en cuenta que, si no tiene un bar de copas cerca, al menos el transporte hasta uno sea fácil.

Otro tipo de establecimientos con una apuesta de comida más exclusiva y, en consecuencia, con menús más caros, no se ven tan beneficiados con estas dinámicas. Este es el caso del Azoque, cuyos menús de cena más cercanos a los 40 euros atraen a menos clientela, ya que según su propia experiencia "la gente busca más el menú entre 25 y 30 euros".

Aún así algunas grandes compañías, principalmente multinacionales, sí que están pagando las celebraciones. Aunque algunas empresas de aquí, en un gesto de buena voluntad, están buscando soluciones intermedias, y se está volviendo bastante común que, con los restos de dinero sobrante de algunas partidas, se haga un bote para pagar parte del coste del menú. Pero, los restaurantes pueden dar fe: la realidad es que no solo se paga a escote, sino que además también organizan los trabajadores, así que más que de empresa estaríamos hablando de cenas de empleados.