El antiguo edificio de Remar en Rosales del Canal se convertirá en el futuro centro cívico de referencia del distrito en el escaso margen de dos años. El Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) presentó ayer, junto a los responsables técnicos de Arquitectura, el plan director del proyecto que prevé una inversión de 2,7 millones de euros, una ejecución en dos fases de solo dos años y una fecha prevista de terminación que, iniciando las obras en el 2018, se sitúa a finales del 2019.
Según detallaron el arquitecto, Fernando Fernández, y el jefe del departamento de Arquitectura del consistorio, Ricardo Usón, es un proyecto realizable para un edificio que contará con más de 4.000 metros cuadrados en dos plantas y otros tantos en el sótano, de los que solo se usarán la mitad, aproximadamente, para ubicar un centro cívico al uso, pero también una biblioteca, un centro de tiempo libre, casa de juventud, sala para conciertos y reuniones --llamada Ágora-- y salas polivalentes para talleres, reuniones u otros usos.
Además, el aparcamiento que planteó Remar de 170 plazas se reducirá a 37 para crear un espacio abierto a la calle, sin vallado. Y los 2.000 metros cuadrados en reserva que quedarán sin ejecutar podrían ser la futura escuela infantil del barrio, una de las carencias más importantes que se han detectado en cuanto a equipamientos y que no se ha podido incluir porque la estructura actual del edificio lo dificulta. Y también la disponibilidad presupuestaria.
El próximo mes de febrero se van a cumplir dos años desde que el ayuntamiento se hizo con el edificio de Remar en Rosales, pagando 2,5 millones. desde entonces, se ha trabajado en proteger sus instalaciones de vándalos e intrusos, y se han invertido 100.000 euros en mejoras mientras se definían los usos. Ahora toca programar los trabajos y ejecutarlos.
