El último quiosco de la antigua Expo que todavía mantenía la fisonomía de entonces cambiará radicalmente de aspecto durante esta temporada. Y también de filosofía. La cercanía a los Juzgados ha alentado la nueva orientación de Luna Nueva, que se convertirá en un restaurante de menú diario, además de terraza para la noche.

Para ello, los nuevos gestores han invertido más de 300.000 euros en la renovación completa del quiosco, trabajos que actualmente están finalizando, dado que la intención de la concesionaria de este espacio es abrir en el fin de semana del 5 de abril.

El cambio será completo, dado que Luna Nueva --el denominado Q8-- era uno de los quioscos originales que estuvo abierto durante la celebración de la Expo en el 2008 y el único que se ha reconvertido. La empresa que ganó la concesión ya en el 2010 --el grupo Espacios Luna-- se comprometió a realizar una ampliación que se está materializando en estos momentos con las obras en marcha. De este modo, se pasará de los 64 metros cuadrados que tenía el quiosco, a los que hay que sumar la terraza, a 164 metros cuadrados cerrados con otros 174 metros cuadrados de terraza.

El nuevo diseño orientará el establecimiento hacia el río y la estructura inicial del quiosco de la antigua Expo se remodelará completamente para quedar integrado en una nueva edificación. En ella se construirán baños nuevos, cocina y almacenes. Además, se instalarán dos terrazas con pérgolas de madera y una entrada acristalada.

CAMBIO DE FILOSOFÍA

Su situación junto a los nuevos Juzgados de Zaragoza ha propiciado el cambio de filosofía del establecimiento, que permanecerá abierto durante todo el año con una oferta gastronómica que comenzará a primera hora de la mañana con desayunos y continuará a la hora de la comida con un menú del día. Como su hermano mayor Luna Morena --también lo gestiona esta misma empresa-- la apertura se prolongará durante la noche con la terraza como plato fuerte, donde se servirán raciones, bocadillos y platos.

El resto de los establecimientos del frente fluvial que cierran en invierno, como Le Pastis, ultima también los últimos toques para prepararse para la nueva temporada.