El Cercanías de Zaragoza lleva diez años enclavado en las últimas posiciones de la eficiencia para el Ministerio de Fomento, que tiene asumido el coste que supone mantenerla funcionando pese a ser, no solo la que menos viajeros mueve en toda España, sino la que menos plazas cubre de las que oferta. No peligra su supervivencia pese a informes como el que ha presentado recientemente Ineco que apunta que actualmente circula con el 92,4% de sus plazas vacías. Son más de 12.000 trenes disponibles y solo un 9% de aprovechamiento por parte de los usuarios que, con solo seis estaciones -Miraflores, Goya, Portillo, Delicias, Utebo y Casetas-, siguen sin ver en este medio de transporte público el idóneo para sus desplazamientos cotidianos. Esto deja tras de sí las peores cifras del país, como evidencia este estudio comparado con el resto de redes existentes en España.

El último informe de Ineco, titulado Revisión de los servicios ferroviarios de viajeros declarados como Obligación de Servicio Público, deja cifras incontestables sobre algo que es más que una percepción. Este estudio, hace referencia a los datos del 2015, cuando se registraron 292.101 pasajeros, pero se da la circunstancia de que el 2017, según los datos oficiales de Renfe Operadora, fue muy similar, ya que terminó con 294.000 viajeros. Así que las conclusiones valen perfectamente para su radiografía actual.

De hecho, las cifras del año pasado representan uno de los peores resultados de los últimos ejercicios pese a contar ya de forma continuada con 80 circulaciones diarias entre Miraflores y Casetas, aprovechando el paso por el túnel de Goya de los trenes regionales y de Media Distancia que, desde hace años, regcogen también pasajeros del Cercanías.

adiós al ‘efecto goya’ // Esos 294.000 usuarios representan 10.000 menos que hace solo un año, ya que el 2016, según los datos proporcionados entonces por la operadora, culminó con 304.863 viajeros y hasta ahora el 2015 era la excecpción de una serie de cinco años en la que, con la apertura de la estación de Goya, en el 2012, siempre había superado la barrera de los 300.000.

De hecho, la terminal que este mes cumple sus seis primeros años de actividad, pasó de tener poco más de 226.000 pasajeros al año a 330.000 en el ejercicio siguiente, 100.000 más; bajó a 303.000 en el 2014; y a 292.100 en el siguiente año. Parece que el efecto que supuso la estación con más reclamo de la línea, por estar en el centro y pegada al eje del tranvía, se ha diluido.

Por eso el estudio que hace Ineco para Fomento tiene aún más interés si cabe. Teniendo en cuenta, además, algo fundamental para los usuarios de la línea de zaragoza, que es el hecho de que está considerada de obligación de servicio público (OSP) por Fomento. Como los otros once núcleos existentes en España, no desaparecerá, ya que reúne el requisito de atender a un área metropolitana de más de 500.000 habitantes.

Los datos que aporta el informe de Ineco son contundentes y dramáticos para Zaragoza, que sitúa a su línea como la más ineficiente de España. Aunque, en la comparativa con el resto de núcleos, solo el de Santander es comparable al de la capital aragonesa, ya que si esta cuenta con 12.731 circulaciones al año, la otra suma 13.264. Pero, aún así. Sus 23 viajeros de media por convoy hace que el aprovechamiento de la línea sea de solo el 7.6%. Es decir, ese 92,4% de plazas vacías de promedio. Está diseñada para que puedan viajar 2,4 millones de pasajeros.

Ni siquiera Santander está en esos números. Con un total de 669.989 viajeros al año, la media se sitúa en 51 por convoy, el doble que en Zaragoza. El resto está a años luz del eje Miraflores-Casetas. Madrid es la que más tiene, con 517 pasajeros por circulación (y 227,8 millones cada año); Málaga, 216 (sobre 9,9 millones); Murcia-Alicante, 107 (de 3,72); Valencia, 150 (de 15,86); Cádiz, 131 (2,8); San Sebastián, 239 (6,15); Sevilla, 122 (7,48); Asturias, 89 (5,13); y Bilbao, 97 (10,18).

LEJOS DE LA MEDIA // Obviamente, tampoco tienen el mismo número de paradas ni llega a tantas poblaciones del entorno. Eso desvirtúa también la comparación en un balance global del cercanías en España que promedia, según Ineco, un 36,6% de aprovechamiento, con un promedio de 314 viajeros por tren.

Con todo, explica el informe que Zaragoza, con 16,6 kilómetros de longitud y seis paradas, su índice de cobertura es del 9%, es decir, que los ingresos que obtiene de la explotación no llega a cubrir ni una décima parte de los costes que representa tenerlo funcionando. El estudio destaca que el porcentaje estatal, del 60,7%, es «un valor razonable y comparable» al de este servicio en Europa. Así que en los 227 millones de déficit que arrastra este servicio en España, unas ciudades aportan más que otras, lógicamente.

Además indica que, como le pasa a Bilbao, su longitud media por viaje realizado, los desplazamientos que el usuario suele realizar, está por debajo de 10 kilómetros, 9,8 en el caso de la capital aragonesa, lo que refleja su mayor densidad del área metropolitana. Esta es una cifra que subiría llegando a destinos como Huesca u otros municipios de la provincia a con los que la DGA quiere conectar. Y, con todo, Ineco propone revisar el funcionamiento para aumentar su uso y aprovechamiento. Como le pide Aragón.