El grupo de CHA en las Cortes de Aragón ha expresado su rechazo al proyecto de unión de las estaciones invernales pirenaicas de Astún, Candanchú y Formigal al entender que esta operación sólo persigue un "pelotazo urbanístico".

La formación aragonesista expresa así su posición contraria al proyecto, después de la celebración de una reunión del Consorcio Urbanístico Canfranc 2000 en la que se ha informado de la preparación de un convenio que prevé transformar la estación internacional en base de operaciones de la futura unión.

CHA lamenta el "empecinamiento" del Ejecutivo regional en el proyecto de unión de estaciones y recuerda que el consorcio se constituyó para la recuperación social y urbanística de la estación internacional y de su entorno.

A juicio del parlamentario de esta formación Joaquín Palacín, para quien la unión de estaciones constituye un proyecto "bárbaro e innecesario", el gobierno aragonés no adquirió la estación de Canfranc "porque confíe en la reapertura de la línea internacional sino porque tendrá un papel central en la unión de las estaciones".

Recuerda a este respecto que la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, manifestó en enero de 2013 que era objetivo de su gobierno la instalación de un telecabina de acceso a las pistas de esquí desde Canfranc.

"No es casual -subraya- que el Gobierno de Aragón desempolve la promoción de este proyecto el mismo día que Rudi señala que la recuperación económica es una realidad innegable, porque lo que están queriendo decir en realidad es que van a permitir volver a las andadas en cuanto sea posible, con pelotazos urbanísticos, que es en definitiva lo que supone la unión de estaciones".