El equipo PSOE-CHA en el Ayuntamiento de Zaragoza mantiene un fuerte desencuentro sobre la fórmula de hacer frente a la grave situación económica que atraviesa la Casa Consistorial. Tras estudiar el plan económico-financiero elaborado por Price Waterhouse y que ha hecho suyo el delegado de Economía y Hacienda, Alberto Lafuente, los nacionalistas han manifestado su absoluto rechazo a la subida de impuestos y a la venta masiva de suelo defendida por sus socios de coalición.

Chunta ya ha presentado a los socialistas un plan alternativo para lograr la estabilidad financiera en los mismos tres años, pero sin hacerlo a costa de disparar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) un 43%, de equiparar los recibos del recibo del agua y la basura a su coste real en sólo dos años y de fomentar la enajenación del patrimonio como plantea Price Waterhouse.

Según sus cálculos, con la reducción del gasto corriente y la refinanciación de la deuda se puede aplicar una subida del IBI menor, sobre todo si se consiguen acuerdos financieros con otras administraciones.

Aunque oficialmente el PSOE no ha hecho suyas las conclusiones del informe de la consultora (el alcalde, Juan Alberto Belloch, dijo que se trataba de una propuesta técnica), el delegado de Hacienda ha defendido a capa y espada sus conclusiones en las reuniones que ha mantenido con Chunta. El economista sólo aceptaría una rebaja del 43% al 30% en la subida del IBI pero hace suyo el resto de consideraciones.

EQUIPARACION GRADUAL De entrada, los nacionalistas rechazan la subida del 43% en la contribución, y sólo están dispuestos a asumir un impacto mucho menor sobre el bolsillo del ciudadano. Respecto a los recibos del agua y basura, que al ser un precio público no puede estar subvencionado, es decir, debe cobrarse al ciudadano el importe íntegro del servicio, su petición es que la subida sea gradual y se equipare al final de la legislatura.

El informe de Price Waterhouse plantea incrementar los recibos en sólo dos años. Así, agua subiría un 18% en el 2005 y otro 7% en el 2006, mientras que la basura sufriría el próximo año un alza similar al IBI y una adicional del 12% en el 2006. Con los tres tributos, las arcas municipales captarían 58 millones de euros más dentro de dos ejercicios.

DAR EJEMPLO El plan económico de CHA también plantea, a diferencia del de Price, reducir en un 1% el gasto corriente como una muestra de cara al ciudadano de que también la Casa Consistorial se aprieta el cinturón. De esta forma, se conseguiría un ahorro anual de 4 millones.

Frente a la venta masiva de suelo para captar 125 millones de ingresos, los nacionalistas plantean otras soluciones. Entre ellas, la búsqueda de acuerdos con otras administraciones para que participen en más proyectos de la ciudad.

Según datos que maneja la corporación, el caso más flagrante es el de la comunidad autónoma: su aportación se reduce a un nimio 0,55% de los ingresos totales. El Gobierno regional financia con poco más de tres millones de euros convenios para servicios sociales y la Casa de la Mujer, una cifra que contrasta con los ingresos totales de las arcas municipales, 577,4 millones de euros.

Los socios de Belloch también consideran que puede buscarse una fórmula de refinanciación de la deuda a más largo plazo, ya que actualmente una parte importante de los créditos están contraídos con un plazo de siete años. Según los cálculos de Chunta, ampliar el plazo a quince años si se eliminan las cláusulas de penalización por amortización anticipada tendría un efecto atemperador sobre las finanzas.