La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha abierto el periodo de información pública del Plan de Desarrollo Sostenible del Entorno Territorial de Jánovas (Huesca), donde se desechó en 2005 la construcción de un embalse décadas después de ser anunciado el proyecto.

Según informa el Organismo de cuenca, junto al plan de desarrollo, que persigue revitalizar y restituir la zona ocupada para el embalse, se someterá también a un periodo de alegaciones el estudio ambiental estratégico favorable a la ejecución de las distintas acciones previstas.

Los objetivos del referido plan territorial se centran en garantizar los servicios e infraestructuras básicas a los habitantes de las tres poblaciones que fueron desalojadas en los años sesenta del pasado siglo, Jánovas, Lacort y Lavelilla.

También se prevé promover la coordinación de las administraciones con el sector privado para desarrollar iniciativas dirigidas a incentivar la llegada de población a la zona y a potenciar un desarrollo sostenible, eficaz y socialmente equitativo.

El plan, negociado con el Ayuntamiento de Fiscal, en cuyo término se ubica la zona afectada, da prioridad a acciones en las que prima el menor coste ambiental y económico, la menor ocupación de superficie, así como el mínimo nivel de emisiones y de movimientos de tierras.

En concreto, se proyecta la construcción de accesos desde Jánovas a Albella a través de un tramo de 3,5 kilómetros, y la conexión de Lacort y Lavelilla con la carretera N-260 (eje pirenaico) mediante la ejecución de las calles y viarios previstos en el proyecto de urbanización de ambos núcleos.

También se prevé la ejecución de obras de abastecimiento de agua a los tres núcleos afectados así como de transporte de energía eléctrica a sus calles principales, que serán urbanizadas en función de las solicitudes de reversión de las casas hechas por las familias de los vecinos expropiados.

La urbanización de los viales se irá ampliando al resto de los cascos urbanos al mismo tiempo que se completen los procesos de reversión aún pendientes, que afectan a más de cien familias.

Además, se proyecta instalar depuradoras de aguas residuales en los tres núcleos de población, acometer la rehabilitación del patrimonio histórico y cultural del valle del río Ara, y desarrollar actuaciones de mejora de edificios públicos y calles de otras poblaciones que se vieron afectadas directa o indirectamente.

Con la tramitación de la Evaluación Ambiental Estratégica, la CHE, que asegura estar cumpliendo con los plazos legalmente establecidos para el plan de desarrollo, se han realizado, en coordinación con el Ayuntamiento de Fiscal, las modificaciones necesarias para reducir la envergadura de las acciones previstas a fin de adecuarlas al entorno y minimizar su impacto.

La concesión para la construcción de un embalse en Jánovas fue hecha por el Gobierno a la empresa vasca Iberduero en 1945, que activó un largo proceso de expropiación en los años sesenta del pasado siglo contra el que se resistieron algunos de los vecinos de los núcleos afectados.

Un nuevo estudio elaborado en 2001 consideró inviable a nivel económico y medioambiental el proyecto, cuya titularidad ostentaba entonces Endesa, y activó un proceso que culminó en 2005 con la desestimación de la obra.

Tres años después se iniciaron los trámites para la reversión de las propiedades de las familias afectadas, todavía sin finalizar.