El riesgo de crecidas súbitas de caudal en los ríos pirenaicos debido a las intensas precipitaciones que tuvieron lugar ayer, provocaron que se recomendara extremar la precaución en aquellas actividades que se realizan en la proximidad de los cursos de agua. La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) no descartó que alguna de las crecidas que se produjeron en los tramos altos de los afluentes pirenaicos fuera de carácter súbito y extraordinario, con capacidad de desbordar el cauce.

Ante la situación que se preveía durante el día de ayer en muchas zonas de Aragón, Protección Civil recomendó en un comunicado mantenerse informado en todo momento por los diferentes medios de comunicación o redes sociales de los fenómenos atmosféricos. Asimismo, si era necesario viajar por carretera, extremar las precauciones, circular mejor por vías principales y autopistas, disminuir la velocidad y no detenerse en zonas donde pueda discurrir gran cantidad de agua.

En caso de lluvias intensas y tormentas, Protección Civil recomienda siempre tomar en cuenta el lugar dónde se aparcan los vehículos ante el súbito ascenso del agua en zonas inundables, que podría arrastrarlos provocando daños u obstaculizar el flujo natural de la corriente.

En momentos de lluvia torrencial, no intentar circular para salvar el vehículo ni ir a pie y buscar lugares en puntos altos donde no llegue el agua.

Ante las tormentas, es necesario evitar permanecer en campo abierto ante la caída de rayos, así como correr y permanecer en lugares elevados como colinas, crestas o divisorias, y tampoco refugiarse bajo los árboles y alejarse de alambradas y objetos metálicos.

Aunque existe el mismo peligro en los núcleos urbanos, es conveniente colocarse cerca de edificios para protegerse. En el caso de las viviendas, hay que evitar las corrientes de aire cuando se registre una tormenta. Si se va conduciendo, ir con las ventanillas cerradas, ya que el vehículo puede ser un buen refugio.