La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha integrado los embalses de Moneva, en el río Aguas Vivas, y Maidevera, en el río Aranda, ambos en la provincia de Zaragoza, en la lista de embalses protegidos (tipo P) para minimizar el riesgo de invasión del mejillón cebra y preservar las masas de agua no invadidas hasta el momento.

La campaña del 2018 de control y seguimiento larvario de mejillón cebra en la cuenca del Ebro concluyó sin declarar afectado por la plaga ningún nuevo embalse, ni por presencia de adultos, ni por concentraciones elevadas de larvas (superior a 0,05 larvas/litro), pero sí se han detectado resultados positivos reiterados por presencia de larvas en bajas concentraciones en los embalses de Moneva y Maidevera, lo que conlleva, como en otros embalses anteriormente, a la aplicación de esta figura de protección.

La clasificación de un embalse como protegido implica, desde el punto de vista de la navegación, la obligatoriedad de desinfectar las embarcaciones que entren y salgan de estos embalses, y la navegación exclusiva, según informaron fuentes de la CHE en un comunicado.

El objetivo es evitar la entrada de las especies exóticas invasoras en estas masas de agua y frenar la expansión a nuevas masas de agua a través de embarcaciones.

DESINFECCIÓN

Para mantener la actividad de la navegación en estos embalses, se deberá contar con una estación de desinfección de embarcaciones en sus inmediaciones, por lo que mientras no se disponga de esta instalación, la navegación queda temporalmente suspendida en ambos embalses.

Las estaciones de desinfección deben ser gestionadas por las administraciones interesadas en fomentar la navegación en el embalse. La desinfección será obligatoria al entrar y salir del embalse y se debe realizar en un punto oficial que permita acreditar ante los agentes de la autoridad que se ha realizado adecuadamente.

La CHE, que regula la navegación fluvial para proteger el dominio público hidráulico, ya ha realizado las comunicaciones pertinentes a las comunidades autónomas (competentes en el control de especies invasoras), y lo irá notificando a lo largo de la semana a los titulares que disponen de una declaración responsable para la navegación en estos embalses.

En la actualidad, existen ejemplares adultos de mejillón cebra (tipo C) en los embalses de Flix, Ribarroja, Mequinenza, Sobrón, Calanda, Caspe II y Civán, Ullíbarri, Urrúnaga, La Estanca de Alcañiz, Barasona, Guiamets y La Sotonera.

Están clasificados como tipo C porque en alguna campaña anterior se ha detectado presencia larvaria por encima de 0,05 larvas/litro los embalses de Talarn, Rialb, San Lorenzo de Mongay, Lanuza, Búbal y La Tranquera.

Y los embalses clasificados como protegidos (tipo P) para aumentar las medidas de protección para evitar la entrada de la plaga a los mismos son Alloz, El Ebro, González Lacasa, El Grado, Ibón de Panticosa, Mediano y Yesa.

Y protegidos pero con navegación suspendida los de Alba, Mezalocha, Las Torcas, Moneva y Maidevera.

Por otro lado, la CHE celebró el pasado jueves en su sede de Zaragoza una jornada de participación abierta al público general, dedicada a los documentos iniciales del Tercer ciclo de planificación, inicio de la revisión de un documento fundamental y que desembocará en el Plan Hidrológico de la Demarcación del Ebro 2021-2027. La presidenta del organismo, María Dolores Pascual y el jefe de la Oficina de Planificación Hidrológica, Manuel Omedas, abrieron esta jornada-taller, que se desarrolló dentro del programa Preparando el Día Mundial del Agua.