Con tan solo diez años, la oscense Valeria Corrales, triunfa en Youtube, la mayor plataforma de vídeos en internet, con su profesora, Patricia Heredia, con un canal propio especializado en robótica, programación y tecnología. Su nombre, ValPat, viene de Val de Valeria y Pat de Patricia. «Queremos ser un equipo motivador. Trabajamos juntas para demostrar que la tecnología no tiene género y que no es difícil, demostrando lo divertida que es y los proyectos tan creativos que se pueden llegar a hacer», aseguran.

Valeria ya tenía un canal en el que subía retos con su hermano y algunos proyectos de programación. Además, seguía tutoriales sobre Scratch (lenguaje de programación) que iba encontrando en YouTube. Sin embargo, poco después, cuando conoció a su profesora decidieron grabar sus propios proyectos para que otros niños, pero sobre todo niñas, se interesaran en verlos. «Era una buena manera de inspirar y motivar a todas las niñas de España para que se interesasen por el apasionante mundo de la tecnología», manifiesta Patricia.

Cada semana graban entre dos o tres vídeos. Ellas mismas eligen los temas que quieren tratar, ya sea porque quieren resolver algún problema de forma ingeniosa o porque ven algún kit o material y lo quieren probar.

La pequeña asegura que es «una niña normal» a la que le gusta leer y hace deporte. «Voy al colegio, entreno cada día a tenis y juego con mis amigos. Aunque cada mañana, después de salir del colegio, voy a MiniVinci (centro educativo de ciencia y tecnología) con Patricia y trabajamos en los proyectos que luego enseñamos», cuenta.

Su profesora trabajaba, hasta hace tres años, como ingeniera desarrollando equipos electrónicos y programándolos. Ahora, asegura que su vida «ha cambiado mucho», ya que por las mañanas investiga con todo tipo de materiales tecnológicos y, por las tardes, da clases a niños y adolescentes sobre robótica.

10.000 euros para 50 vídeos

Para poder llevar a cabo su proyecto, han llevado a cabo una campaña de crowdfunding en la plataforma Kickstarter. Su objetivo es recaudar, al menos, 10.000 euros para poder realizar 50 videos relacionados con el mundo Steam, a lo largo del año, sobre programación de robótica, de matemáticas y de impresión 3D, entre otros. Su canal cuenta con más de 500 suscriptores. Por ello, la grabación y la edición de los vídeos las realizan expertos para dar un aspecto más profesional. Cada grabación les cuesta alrededor de 200 euros: materiales, diseño de la web, promoción del canal y gestión de redes sociales.

La primera en apoyar esta iniciativa fue la consultora tecnológica Indra. «Estamos muy contentas porque creemos que vamos a conseguir la financiación, gracias a las donaciones de mucha gente y gracias a que otras compañías como IECISA están también interesadas en ayudarnos», afirma el equipo ValPat. «Nuestro objetivo es inspirar a miles de niñas, de todo el mundo, para que entiendan que pueden ser lo que quieran ser», subrayan las ingenieras.

Con esta campaña pretenden tener un canal de éxito en el que cada vez haya más niñas suscritas y, no solo eso, sino que cada vez puedan saber que hay más interesadas que hagan proyectos de tecnología.

Está claro que ambas comparten más que una afición. Y es que Valeria dice que quiere ser ingeniera aunque todavía no sabe en qué rama especializarse. Lo que sí que tiene claro es que quiere estudiar en una universidad de Estados Unidos. «Me gustaría poder entrar en la de Stanford o en el Massachusetts Institute of Technology (MIT)», subraya la joven estudiante.

Desde que se conocieron, el equipo de ValPat ha participado en diversos proyectos importantes. El primero de ellos fue en el Women Techmakers Zaragoza en el 2017, donde dieron una conferencia. Desde entonces, han seguido dando charlas en eventos y en colegios hasta el año pasado, cuando la compañía Indra les convocó a un evento en Madrid.

Además, Facebook les invitó a dar una charla en inglés para un evento con mujeres de todo el mundo en la que, aseguran, tuvieron «que preparar mucho, pero fue una experiencia muy gratificante». Su trabajo ha sido reconocido por la Fundación Inspiring Girls, que convirtió a la joven Valeria en la Inspiring Girl del 2018.