Cincuenta científicas de distintas ramas del conocimiento han demostrado hoy a otras cincuenta niñas que existen mujeres dedicadas a la ciencia, como ellas mismas en el presente o como otras en el pasado que, a pesar de su contribución al saber, han sido ignoradas a lo largo de la historia.

Matemáticas, biólogas, médicas, químicas o ingenieras, entre otras, han dialogado durante seis minutos con las 48 niñas que han participado en este Encuentro con científicas, organizado con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, que se celebra este próximo 11 de febrero.

Así, en el Edificio Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, la ingeniera Yolanda Bravo le ha contado a Olivia, de diez años, que los científicos y los técnicos tienen una cosa en común: encontrar y desarrollar "cosas nuevas", algo que ha fascinado a esta niña de diez años, cuyo principal interés, ha dicho, es "descubrir".

Despertar esa vocación científica o, al menos, ese interés por la ciencia en las niñas, como el mostrado por Olivia tras hablar con Yolanda, ha sido el objetivo de esta iniciativa, con la que también se ha querido dar a conocer el nombre de aquellas mujeres científicas que han sido referentes por su contribución y, al mismo tiempo, olvidadas en los libros de texto.

Por medio de un juego, en torno al cuento "La científica y el guisante", una versión del cuento Hans Christian Andersen, las participantes han conocido a la astrofísica británica Jocelyn Bell, quien, a pesar de que fue ella quien descubrió unos cuerpos celestes que brillaban con pulsos regulares, fue su director de tesis quien recibió el Premio Nobel de Física por este descubrimiento.

Y así otros nombres como la bioquímica española Margarita Salas, quien descubrió la patente más rentable de la historia española; la química inglesa Rosalind Franklin, quien contribuyó a la compresión de la estructura del ADN, o la médica Virginia Apgar quien desarrollo un examen clínico para evaluar la salud de los recién nacidos en el momento de nacer, reduciendo la mortalidad infantil.

Adela Giralde, quien ha dirigido este "Cuentacientíficas", también en el Paraninfo, ha explicado que sólo un 7,5 % de los referentes científicos y culturales que aparecen en los libros de texto son mujeres. "Esto lo vamos a cambiar", ha asegurado con decisión.

A este respecto, la profesora de Matemáticas Aplicada de la Universidad de Sevilla Clara Grima ha reconocido que ella misma descubrió que Emmy Noether, "una de las científicas más importantes del siglo XX" que, a su juicio, está a la altura de Albert Einstein, era una mujer cuando ya era doctora, después de haber cursado toda la carrera.

"Cuando me enteré me enfadé, nadie me había dicho que era una mujer y yo, por mis prejuicios, nunca me planteé que algunos de los matemáticos tan ilustres que yo había estudiado podían ser una mujer", ha manifestado.

Grima ha comentado que el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, impulsada por Naciones Unidas ante la "evidente brecha de género", está cogiendo fuerza en España, donde se han programado actividades como las llevadas a cabo hoy en la Universidad de Zaragoza.

Entre estas iniciativas figura también la exposición "En clave de género", ahora en el Edificio Paraninfo, que recorrerá distintas ciudades españolas y que muestra el papel de la mujer a lo largo de la evolución.

Por último, la consejera de Innovación, Investigación y Universidad del Gobierno de Aragón, Pilar Alegría, quien se ha acercado a conocer el desarrollo de estas actividades, ha afirmado que, de esta forma, se muestra a las niñas que la única barrera es su "talento" y que hay mujeres en todas las ramas del conocimiento que están haciendo una "magnífica labor y profesión que ellas también pueden ejercer en un futuro".

Asimismo, ha apuntado que de los 26.000 alumnos que hay en la Universidad de Zaragoza, 14.000 son mujeres y 12.000 hombres y ha señalado que esta mayoritaria presencia femenina en las aulas no se encuentra, sin embargo, en las cátedras o en el profesorado.

"Si este país, esta Comunidad Autónoma, quiere asentarse en un modelo basado en el conocimiento, no podemos prescindir de la mitad de la población", ha subrayado.