El abandono de animales en Zaragoza se mantiene en cifras que apenas experimentan cambios. En lo que va de año, han entrado en el Centro de Protección Animal del ayuntamiento 260 perros, 122 gatos, 6 pequeños mamíferos, un reptil y un ave, números muy parecidos a los de las mismas fechas del 2018, según señala Alicia Serrano, jefa de la Unidad de Protección Animal. «Recibimos animales abandonados que presentan síntomas de malos tratos, con extrema delgadez, enfermedades parasitarias e infecciosas, sin vacunar y con marcas por apaleamiento o atropello», explica.

Un número muy importante de los perros custodiados en el centro que regenta, que pronto se moverá al polígono Empresarium, pertenecen a razas potencialmente peligrosas. Son los denominados PPP, que se van acumulando y tienen difícil salida mediante la adopción por sus propias características y por los requisitos legales. En la actualidad, hay en el centro 52 de estos ejemplares. «Hay que pensar que no todos los perros que guardamos son adoptables», explica Serrano. «Algunos canes requieren un trabajo previo con ellos».

Una parte importante del trabajo que se desarrolla en Protección Animal lo llevan a cabo voluntarios de ambos sexos que se encargan de socializar a los gatos y de pasear a los perros. También visitan las casas donde han sido acogidos para ver en qué estado se encuentran y cómo se adaptan al nuevo medio. «Su papel es muy importante», dice la jefa del servicio.