Cinco jóvenes, tres de ellos menores de edad, han sido detenidos por la Guardia Civil en Tarazona por introducirse, presuntamente, en los locales de las peñas, amedrentar a los menores que se encontraban en ellos, causar destrozos y robar televisores, altavoces, reproductores de deuvedés, equipos de música y videoconsolas. Los sospechosos, dos de los cuales tienen 18 y 19 años, están imputados por pertenencia a grupo organizado, extorsión y coacciones a menores, robo con violencia e intimidación con arma blanca.

Su detención se llevó a cabo tras las denuncias presentadas ante la Guardia Civil desde el mes de octubre contra el grupo por amenazar e intimidar a varios menores cuando se encontraban en el interior de sus peñas.

Actuaban siempre en horario nocturno y amenazaban e intimidaban a los menores mediante violencia física y verbal, llegando incluso a utilizar armas blancas. Algunas de sus víctimas, atemorizadas, acudieron a la Guardia Civil para denunciar los hechos.

Los agentes descubrieron que uno de los menores había sufrido una lesión con arma blanca de la que tuvo que ser atendido en un centro sanitario en el mes de enero del 2013, aunque había asegurado que la lesión se produjo por un accidente doméstico por miedo a represalias.

Los detenidos cuentan con numerosos antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio, las personas, así como infracciones administrativas por tenencia y consumo de sustancias estupefacientes en la vía pública y alteración del orden público. En la operación, denominada Cid, participaron agentes de la Guardia Civil de Tarazona, Borja y La Almunia.