Pidió que no se condenara a su expareja, pero el relato terrorífico que describió la víctima ha hecho que la Audiencia Provincial de Huesca haya decidido imponer cinco años de prisión a Antonio Callejas Pera. Este joven, vecino de Barbastro, mantuvo raptada a la víctima en el interior del armario de su casa, después de amordazarla y maniatarla. También le quitó el móvil e, incluso, le propinó un puñetazo en el ojo izquierdo mientras la insultaba y agarraba con fuerza del cuello, asfixiándola.

La Fiscalía solicitaba inicialmente un castigo de 13 años de cárcel como supuesto autor de siete delitos, si bien ha sido condenado por quebrantamiento de la medida cautelar, lesiones y detención ilegal. Asimismo, el tribunal provincial ha estimado la solicitud del abogado defensor, Alejandro Sarasa, quien pidió que se tuviera en cuenta la drogadicción del acusado. Los magistrados se apoyan en los análisis y en que la propia víctima aseguró durante el juicio que le vio consumir speed.

Pero junto al principal encausado se sentó en el banquillo su amigo José Manuel Barrio, quien afrontaba 12 años de privación de libertad como cooperador necesario de la detención ilegal de la chica y que, finalmente, ha sido castigado con tres meses de cárcel.

Los hechos enjuiciados y ahora sentenciados ocurrieron el 14 de agosto del 2020. Ese día el compañero de piso del ahora exnovio de la víctima la llamó para quedar y esta, al salir del trabajo, acudió al domicilio.

La joven pretendía huir cuando su exnovio la sorprendió y la agarró del pelo, volviéndola a llevar a la habitación. Fue allí donde ella le pidió que le bajaran al salón, que ella no iba a marcharse. Le convenció, si bien ya en esa estancia le pidió que le diera su móvil porque «tenía sospechas» de que en su tiempo en la cárcel le había sido infiel. En un momento en el que el joven se despistó consiguió fugarse.

El acusado está pendiente de otro juicio. Fue detenido cuatro meses antes de este secuestro por, supuestamente, aprovecharse del estado somnoliento de la víctima para violarla, grabarlo y enviar el vídeo a sus amigos