Investigadores del Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) y de la Universidad de Zaragoza han desarrollado un sistema de pagos por servicios de los ecosistemas que permite reconocer económicamente a los agricultores y ganaderos su contribución objetiva a la provisión de servicios ambientales a la sociedad.

El sistema, ideado por Tamara Rodríguez y Alberto Bernués, del CITA, y por Ana María Olaizola, de la institución académica, ha sido publicado en la revista científica Ecosystem Services, informan fuentes del Gobierno de Aragón en una nota.

Este novedoso sistema de pagos por servicios de los ecosistemas está basado en evidencias científicas y es completamente operativo y fácil de usar a través de una hoja de cálculo.

Su diseño es genérico y por lo tanto adaptable a diferentes sistemas agrarios y objetivos ambientales, ademas de recoger las opiniones de diferentes agentes sociales implicados en el desarrollo sostenible de la actividad agraria.

Por todo ello, añaden las fuentes, su incorporación podría aumentar la legitimidad de la futura PAC, siguiendo el criterio de asignar dinero público para servicios públicos.

En el sistema de pagos, los investigadores cuantifican los beneficios de las prácticas agrarias de las explotaciones sobre el paisaje, la biodiversidad, la prevención de incendios forestales, la captura de carbono y la provisión de alimentos de calidad y, en una segunda etapa, se asigna el presupuesto disponible a dichas prácticas agrarias de acuerdo a la política establecida

Para que los pagos sean efectivos, deben acompañarse de un sistema de seguimiento del cumplimiento de los objetivos.

El programa se basa en el convencimiento de que, siendo el sistema de producción de alimentos hoy día uno de los principales contribuyentes a la degradación del medio ambiente, determinados sistemas de producción y sus prácticas agrarias pueden proporcionar beneficios ambientales a la sociedad conocidos como servicios de los ecosistemas.

No obstante, agregan desde el Gobierno, los agricultores no tienen incentivos para proporcionarlos.