El buen tiempo acompañó en la primera jornada de unas fiestas del Ángel que ya han colgado el cartel de completo en la capital turolense. Y eso que todavía falta una semana para que el pañuelico cuelgue del Torico, pero la música, el ambiente y los miles de visitantes que se han acercado a Teruel tomaron literalmente la ciudad, con las actividades programadas y, sobre todo, las ganas de vivir la fiesta a pie de calle. El centro volvió a vivir una de esas jornadas de lleno y hoy se reserva el turno para la liturgia, con la procesión a la patrona, Santa Emerenciana, y más actividades para dar colorido a los días más multitudinarios del año.

Una jornada con citas deportivas, como la exhibición de spinning, o el open de voley playa en el parque de los Fueros, o el trofeo de petanca, pero también para que gigantes y cabezudos hicieran correr a los más pequeños. En la calle, que es lo que más les gusta a los turolenses de su fiesta.

En las actuaciones musicales, anoche le tocaba el turno a Loquillo, que volvió a captar la atención de vecinos y visitantes en el interior del ferial del Palacio de Exposiciones y Congresos. Hoy le toca el turno a David Sancho, en la plaza del Torico.

Pero tampoco podía faltar el ruido de tambores para acompañar el ambiente que durante todo el día inundó las calles de Teruel. En un día de terrazas, actividades de las peñas (su programación se inicia el próximo jueves) y los hoteles y alojamientos turísticos al completo, tan tradicional como la propia fiesta.

Pero esto era solo el principio, miles de personas acuden y acudirán desde el entorno en los próximos días también como hoy o ayer, por el programa de festejos ha puesto rumbo a la Vaquilla y la ciudad no descansará hasta que en la medianoche del 14 al 15 la peña La Botera retire el pañuelico y ponga el cierre a nueve días de celebración. Ayer solo era el inicio.