El Cluster Aragonés de Alimentación presentó ayer en Ibercaja Patio de la Infanta su nueva línea de innovación Aragón, una experiencia, un programa con el que tratará de forjas alianzas con el mundo de la gastronomía, la cultura y el patrimonio. La primera gran acción de la iniciativa tendrá lugar en Zaragoza la próxima primavera y el hilo conductor de la misma será la ruta de la seda, con el objetivo de conocer mejor las posibilidades de negocio que el mercado asiático ofrece a este sector.

Las jornadas, de cuatro días, incluirán actos como conciertos, cenas temáticas, conferencias o misiones inversas.

El proyecto Aragón, una experiencia pone el foco en la comercialización de los productos alimentarios de las empresas del clúster, vinculando la identidad de este sector con la riqueza cultural de Aragón, que incluye múltiples elementos declarados Patrimonio de la Humanidad, un amplio legado arquitectónico, un gran repertorio musical ligado a la Corona de Aragón y, por supuesto, una gastronomía que destaca tanto por las materias primas como por los productos transformados.

«El clúster ha estado muy orientado a desarrollar nuevos productos, ahora también vamos a poner el interés en la comercialzación», explicó María Eugenia Hernández, directora de la entidad, que suma 42 empresas alimentarias.