El hidrogeólogo de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) Javier San Román ha recorrido con su familia --a pie, en coche o en bicicleta-- todos los senderos que incluye en su libro Ríos y humedales de Aragón , que ayer presentó en la Biblioteca del Agua y el Medio Ambiente. El número 15 de la colección Rutas CAI es toda una apuesta de la representación del valor vital del agua en la comunidad. Lagunas, ibones, nacimientos de ríos o saladas pueden conocerse a partir de ahora a través de senderos bien señalizados y de escasa dificultad para su realización que penetran en valles abiertos o en oscuros desfiladeros.

"He intentado escoger paisajes representativos de todo el territorio, algunos de ellos completamente desconocidos para el ciudadano, pero que hay que cuidar y preservar", afirmó ayer.

Gráficamente, cada itinerario cuenta con fotografías, apuntes, detalles y mapas orientativos. "La colección de CAI publica una serie de monográficos sobre espacios protegidos que en este caso se han evitado, como Ordesa, Guara o los galachos de La Alfranca", añadió. Entre los que se han incluido aparecen, por ejemplo, La Boca del Infierno, el río Bolática, La Canal Roya y los ibones de Anayet, El Parrizal de Beceite o el nacimiento del río Pitarque.