Los trabajos de recuperación de la cúpula de la colegiada de Santa María de Mediavilla, en Calatayud, están en su recta final. Quedan por terminar algunos elementos escultóricos y en las próximas semanas se comenzará a desmontar el espectacular andamiaje interior.

La actuación ha sido realizada por la empresa Construcciones Iberco, SA, por un importe de 265.874 euros y ha sido financiadas por la Dirección General de Arquitectura, Vivienda y Suelo del Ministerio de Fomento, bajo la dirección del arquitecto jefe de obra Fernando Alegre, y el apoyo del Ayuntamiento de Calatayud y del obispado.

Son muchos los años los que este templo ha permanecido cerrado al público y a los viajeros que quieren conocer la ciudad del Jalón. A punto de cumplir 135 años desde que se declaró Monumento Nacional y se publicó en la Gazeta de Madrid. Muchos años de remiendos y obras múltiples que han llevado a mantener vivo uno de los edificios más importantes en la historia de Calatayud.

Los objetivos de esta fase han afrontado los trabajos de modificar el sistema de lucernarios para que la luz del exterior entre de manera más directa. Además, se han abierto los vanos, tabicados desde hace años, y se han colocado cerramientos con vidrieras emplomadas. Para el alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, «el resultado es muy positivo y esperamos que en las próximas semanas pueda firmarse un nuevo convenio con el Ministerio de Cultura». El ayuntamiento ya ha sido informado por el Gobierno central, añadió, y cuenta con una partida de 800.000 euros en los presupuestos municipales del 2018 para este proyecto».