Durante los años 2019 y 2020, el Colegio Oficial de Médicos de Zaragoza (COMZ) ha registrado una treintena de agresiones entre el personal médico de Zaragoza, la mayoría de ellas producidas en su jornada laboral.

Así lo ha comunicado la institución colegial a la Organización Médica Colegial de España (OMC), que este viernes hace también públicos los datos del Observatorio Nacional de Agresiones a Médicos del año 2020.

Coincidiendo con el Día Europeo contra las Agresiones a Sanitarios, el COMZ ha insistido en la importancia de que los sanitarios, víctimas de hechos violentos -tanto físicos como verbales- denuncien ante la policía y ante sus organizaciones.

En este sentido, desde el colegio aseguran que el servicio de asistencia telefónica puesto en marcha en 2019 ha servido para dar visibilidad a agresiones que antes no se notificaban, informa el COMZ en una nota de prensa.

Para abordar esta situación, es necesario que la sociedad esté sensibilizada ante el problema y haya tolerancia cero ante las agresiones de cualquier índole.

Para ello, el COMZ considera "imprescindible" que la Administración Sanitaria dedique recursos económicos y humanos acordes a las necesidades reales del Sistema Nacional de Salud.

Y es que, muchas de las conductas violentas de los pacientes tienen que ver con la saturación de las consultas o los servicios de Urgencia, las listas de espera, o la infradotación de la Atención Primaria. A ello se suman los efectos de la pandemia, que todavía están por analizar.

La institución colegial registró 12 agresiones en 2020 y 17 en 2019, cifras muy superiores a las de años anteriores: en 2018 fueron 5 y en 2017, un total de 4. La mayoría de las agresiones (11) notificadas al COMZ en el último año se dieron en el ámbito de la sanidad pública.

Los doctores agredidos en 2020 -seis hombres y seis mujeres- eran mayores de 46 años en todos los casos, aunque la franja de edad más afectada fue la que va de los 56 a los 65 años, pues aglutina casi la mitad de las agresiones.

La práctica totalidad de los episodios violentos registrados por el COMZ se produjeron durante el ejercicio de la profesión, tanto en Atención Primaria, como en el hospital y en visitas a domicilio o itinerantes. Según los datos del COMZ, las agresiones más frecuentes fueron los insultos y las vejaciones, seguidas por las amenazas y las coacciones.

En hasta cinco casos, estas produjeron daños psíquicos a los médicos agredidos, dos de los cuales tuvieron que solicitar la baja. En uno de los casos se produjeron también daños materiales.

Las causas de las agresiones registradas en 2020 fueron de lo más diversas, y en algunos casos se han alegado varias de ellas a la vez. En tres casos estuvieron motivadas por discrepancias con la atención médica y en otros tres, por discrepancias personales. Otras agresiones se justificaron por negarse el médico a recetar lo propuesto por el paciente o por informes no acordes a sus exigencias. Tan solo se registró una relacionada con la covid-19.

Mayo fue el mes en el que más incidencias se registraron (3), seguido de enero, junio, julio y octubre -con dos casos cada uno-, y marzo (1).

En cuanto al perfil de los agresores, en la mayoría de los casos se trató de personas de entre 40 y 60 años y hasta ocho de los altercados estuvieron protagonizados por mujeres. Seis de los agresores eran pacientes programados, otros cuatro pacientes no programados y otros dos, acompañantes.

De las 17 agresiones registradas durante 2019, 10 se dieron en Atención Primaria, tres en hospitales, una en los servicios de urgencia de atención primaria y otra en un ámbito distinto. La mayoría (14) se produjeron en el ámbito de la sanidad pública y durante la jornada laboral.

Hasta seis colegiados reportaron que habían sufrido lesiones psíquicas, mientras que uno señaló que había sufrido daños físicos. En tres casos, los profesionales sanitarios pidieron la baja médica. Ocho agresiones se produjeron por discrepancias en la atención médica y cinco por demoras en el tiempo de atención.

Para ayudar a los facultativos ante este tipo de situaciones, el Colegio de Médicos de Zaragoza puso en marcha en 2019 un protocolo de actuación y un teléfono de asistencia para aquellos colegiados que se sientan en peligro o hayan sufrido algún tipo de agresión.

El número de teléfono (601 755 044) funciona las 24 horas del día de lunes a domingo y proporciona acompañamiento y asesoramiento sobre cómo denunciar ante las autoridades policiales y además a través de este teléfono se guía sobre el servicio gratuito de asesoría jurídica que tiene el Colegio de Médicos de Zaragoza y que cubre todo el proceso.