El nuevo plan de bilingüismo de Aragón permitirá a los colegios poder decidir qué asignaturas se imparten en lengua extranjera, siempre y cuando justifiquen que un tercio de la carga lectiva (un 35% de horas) se desarrollará en otro idioma.

Hasta ahora, los centros se ceñían al plan British Council, que obligaba a aplicar el bilingüismo siempre en materias de Ciencias Naturales, Ciencias Sociales y Artística e impedía cualquier cambio. Con el nuevo proyecto, presentado ayer por el Departamento de Educación, los colegios consigue una mayor «flexibilidad» y podrán variar las asignaturas en lengua extranjera cada curso, siempre y cuando lo comuniquen con antelación. Podrán incorporar el idioma también en las actividades del centro, en proyectos europeos o en actividades complementarias, pero no en extraescolares. El hecho de ser un 35% de su horario obligará a que sean varias las materias impartidas en otro idioma.

El modelo se iniciará en septiembre de forma experimental en ocho centros de Aragón y beneficiará a 800 alumnos de 3 años (1º de Infantil). La intención, según explicó ayer la consejera de Educación, Mayte Pérez, es que la aplicación del nuevo modelo de bilingüismo «sea progresiva» en todos los centros de la comunidad para que estos logren diseñar su itinerario bilingüe.

Mientras tanto, Aragón mantendrá los modelos vigentes para que todos alumnos que iniciaron su etapa escolar con ellos puedan terminarla. Actualmente, 176 centros cuentan con algún tipo de proyecto de bilingüismo.

NIVEL B2 y c1 en profesorado / Los colegios que pondrán en marcha ya este plan el próximo curso son: Violada-Monegros de Tardienta (Huesca); Nuestra Señora del Pilar, en Monreal del Campo (Teruel); Ensanche (Teruel); Ferrer y Racaj de Ejea de los Caballeros (Zaragoza); Parque Venecia (Zaragoza); Recarte y Ornat (Zaragoza); Valdespartera IV (Zaragoza); y el Centro Integrado de La Jota (Zaragoza). Este último caso, al tratarse de un colegio que combina Infantil, Primaria y Secundaria, también se aplicará en 1º de la ESO. Los centros que desarrollen este modelo se denominarán Centro Brit Aragón.

En el apartado del profesorado, al docente se le exigirá un nivel B2 de idiomas y, como novedad, los centros tendrán que tener profesores que posean al menos un nivel C1. Algo que con el British Council se soluciona mediante colaboradores o auxiliares con C1, pero estos no tienen siempre la titulación. «En el análisis que hemos hecho del modelo actual nos hemos dado cuenta de que necesitamos titulados, porque el British Council tiene dificultades para incorporar asesores lingüísticos. Hay una carencia de graduados, por lo que se ha tenido que contar con nativos que complementan las clases», dijo Pérez.

Por otro lado, el Centro Aragonés de Lenguas Extranjeras para la Educación (CARLEE), creado el pasado año, desarrollará una labor fundamental en la formación. «El 80% de los asistentes para lograr el B2 y el C1 lo lograron con éxito», añadió Pérez. El centro atendió en el 2016 a 1.085 profesores, pero recibió más de 1.600 solicitudes para asistir a sus cursos.