Varias asociaciones de comerciantes y de vecinos de Zaragoza han entregado hoy 13.600 firmas en el Registro del Ayuntamiento para mostrar su "total" oposición a la segunda línea del tranvía.

Las firmas, recogidas desde el pasado mes de abril, corresponden a las asociaciones Sector Comercial Avenida Madrid, de vecinos de Nuevo Delicias, Nuevo Futuro, Conde Aranda y Vía Romana y Cultural Catalina de Aragón, ya que el trazado previsto recorrería estas zonas.

El coste del proyecto se calcula por encima de los 1,5 millones de euros dentro de un global que superaría los 200 millones, recuerdan los comerciantes, para los que esta actuación supondría la "muerte" tanto de los negocios como de la vida en la calle.

La iniciativa también cuenta con el apoyo de la Asociación de Empresarios del Sector Comercial Miguel Servet y de Conde Aranda, al ser calles por las que pasa directamente el trazado de la segunda línea.

Este "frente común" pide la paralización de inmediato de la licitación del concurso preparatorio de estudios y proyectos para una línea que atravesará la ciudad en su eje este-oeste.

Desde la Asociación de Empresarios del Sector Comercial Avenida Madrid, su presidente, Sergio Bretos, ha expresado el recelo existente en los establecimientos, tanto de esta vía como de calles adyacentes, porque "supondrá una modificación sustancial en hábitos básicos y para la accesibilidad de las personas".

En este sentido, el portavoz de esta zona ha asegurado que la segunda línea del tranvía "agravará los problemas ya existentes" y "no solucionará nada que no tengamos, ya que estamos conectados con todos los barrios ".

Sin embargo, Bretos ha apuntado que sería conveniente que el consistorio centrara sus esfuerzos en otros aspectos como "la falta de aparcamientos en Delicias o el envejecimiento del mobiliario urbano".

En el Sector Comercial Conde Aranda, su máximo responsable, Joaquín Contamina, ha dicho que, tras informar a los comercios de la zona, muchos han expresado "su intención de cerrar e irse a otras zonas" si se materializa esta actuación urbanística.

También ha señalado que "una obra como ésta no tendría que crear nuevos problemas, sino dar soluciones".

El presidente del Sector Comercial Miguel Servet, José Manuel Cazorla, ha mostrado su rechazo porque "no cabe" y ha indicado que implicaría "unas aceras más estrechas y la desaparición del carril bici y del tránsito de coches y autobuses".

Cazorla ha remarcado que el efecto final puede ser "la muerte de los negocios, el fin de muchos puestos de trabajo y de vida en las calles" y ha reclamado que "se tenga en cuenta la opinión de todos los ciudadanos".

Por su parte, el presidente de la Federación de Empresarios de Comercio y Servicios de Zaragoza y Provincia, ECOS, José Antonio Pueyo, ha señalado que el proyecto de la segunda línea es un "despropósito".

Y ha explicado que "habrá que esperar" a la nueva corporación municipal, tras las elecciones de mayo, para tratar el asunto "con mayor profundidad".