Las grullas han comenzado a llegar a la laguna de Gallocanta, aunque en menor proporción que el pasado año. Los 15.000 ejemplares censados el pasado lunes, el mayor número hasta el momento, se quedan bastante lejos de las cifras medias alcanzadas en octubre y noviembre del 2003, con días de hasta 32.500 individuos.

El paso migratorio continuo a tierras extremeñas puede tener parte de razón, aunque hay que recordar que hace algunos años las grullas no llegaban en masa a esta laguna de la provincia de Zaragoza. No obstante, el paso se prolonga hasta mediados del mes de diciembre, por lo que todavía es pronto para hacer balance.

Entre las curiosidades de este año, Javier, uno de los responsables del albergue Allucant, comenta la belleza que en esta ocasión está acompañando a las grullas por la gran cantidad de agua acumulada en el humedal. Así, quien visite el lugar podrá comprobar la compañía de patos, ansares y toda una serie de aves propias de las zonas húmedas.

DORMIR EN ZAIDA Esta temporada las grullas están también aprovechando una pequeña laguna, denomina Zaida, para dormir. Un espacio localizado justo antes de la ermita, que por lo general es uno de los mejores observatorios de la especie. Sin embargo, los vuelos rasantes junto a este edificio no se están produciendo con la continuidad deseada por los visitantes, que pueden sentirse un tanto decepcionados.

Gallocanta es una de las mayores lagunas saladas naturales de Europa. Sus especiales características y emplazamiento en las rutas migratorias han posibilitado su inclusión como zona húmeda de importancia internacional, y referencia para miles de aves migratorias. Eso la convierte en lugar idóneo para la observación de aves.

"No se trata de ir hacia las grullas, sino esperar y gozar de los pasos de las bandadas. Porque el impacto más grave es el que provoca el hombre", afirma Javier. De ahí que lo primero que se aconseja al visitante es acudir al centro de interpretación o al albergue para pedir información sobre posibles rutas o puestos en donde apostarse, así como recibir una serie de consejos que transformen el viaje en todo un éxito.