Las obras de remodelación del antiguo asilo de San Julián como centro social y conservatorio comenzaron ayer después de 17 años desde que el Ayuntamiento de Teruel adquirió el edificio. La alcaldesa de la ciudad, Emma Buj, afirmó que «sacar este proyecto adelante era un objetivo para el equipo de gobierno» y además apuntó que «es una obra altamente demandada por la ciudad que va a dinamizar el barrio». El presidente de la Asociación de Vecinos San Julián, Pepe Polo, se mostró orgulloso ya que «es un revulsivo cultural para toda la ciudad».

La obra la lleva a cabo la Unión Temporal de Empresas (UTE) por 6.871.172 euros. La cifra rebaja un 18,4 % el presupuesto de licitación, lo que permite al consistorio ahorrarse 1.549.381 euros. El proyecto recibe dinero del Fondo Especial de Teruel, del que la alcaldesa confía que sigan llegando fondos para completar el equipamiento.