Los propietarios de los pisos de la demolida casa azul de Calatayud decidieron ayer llevar el caso a los tribunales y solicitar al juez que el Consorcio de Seguros les abone las respectivas indemnizaciones. La mayor parte de los afectados por la sima que se abrió en la calle Justo Navarro el 10 de noviembre del 2003 se reunió ayer con los abogados que ha contratado la junta gestora que representa a la comunidad presidida por Juan José Langa.

Los vecinos, tras conocer de los letrados que el Consorcio de Seguros ha descartado cualquier tipo de compensación económica, optaron por llevar el caso a los juzgados, para que sea allí donde se detallen las causas que provocaron que la tierra se abriera en la base de un bloque de 52 pisos y varios locales. Algo que obligó a su posterior demolición.

LAS CAUSAS, CLAVE Precisamente en los motivos que provocaron el tremendo socavón que hizo ceder la casa radica la polémica que ahora se ha generado en torno al caso. Según la legislación, algunas causas naturales permitirían a los vecinos cobrar una compensación del Consorcio de Seguros, algo que, sin embargo, éste último no ha contemplado en esta ocasión.

El organismo justifica su decisión en un informe de un catedrático de geología de Madrid, donde sí se detallan causas naturales, pero no sujetas a compensación alguna. En concreto, el experto apunta como motivo principal las variaciones en el nivel freático de la zona, según informaron ayer los abogados de la comunidad.

Por otro lado, en la asamblea de ayer se escucharon voces que pedían que el ayuntamiento no quedara todavía fuera de cualquier responsabilidad, ya que siempre se ha mirado de reojo al sistema de tuberías de la ciudad, tanto de abastecimiento como de desagüe. Una población que, además, está marcada por distintos ejemplos en los que la tierra ha cedido a causa de la erosión de los materiales yesíferos de su subsuelo.

Sin embargo, la mayor parte de los vecinos ha decidido descartar acciones contra el consistorio que dirige Fernando Martín, del que esperan "toda la colaboración posible" para agilizar la construcción del nuevo inmueble que se edificará en el mismo solar. Los abogados de la comunidad de la casa azul también están en contra de responsabilizar al ayuntamiento.

POSIBLE CONVENIO Según una de las letradas contratadas por la junta, existe un convenio apalabrado --aseguró que incluso está escrito, pero no firmado-- con los responsables municipales para "recibir todo tipo de facilidades", incluyendo el permiso para elevar una planta y media más el nuevo edificio --el derruido tenía cinco alturas--, y así poder obtener una vía de financiación con la venta de los nuevos pisos.

Por otra parte, el propio alcalde bilbilitano es partidario de que el Consorcio de Seguros se haga cargo de las indemnizaciones. Fernando Martín insinuó que los afectados deberían continuar con su reclamación ante el Consorcio, en unas declaraciones efectuadas en la emisora local de la Cadena Ser. El primer edil dijo, apenas un par de horas antes de que comenzara la reunión de los afectados, que "en sus manos (de los vecinos)" estaba seguir "con el caso adelante".