La comunidad educativa de Olba, en Teruel, se manifiesta este martes para exigir la habilitación de una escuela en la cabecera del municipio y no en el núcleo de Los Ramones, distante varios kilómetros.

La escuela contará este año con medio centenar de alumnos y alumnas, 15 más que el pasado curso. Olba se ha convertido en un punto de atracción para familias que buscan un proyecto educativo innovador, encabezado por la Comunidad Educativa Marina, que propugna el desarrollo integral del alumnado y su integración en el entorno.

En este contexto, ocupa un lugar de gran importancia el huerto, en el que el alumnado adquiere conocimientos sobre el medio natural.

"La decisión de que el colegio se sitúe en Los Ramones, a cuatro kilómetros, ha sido tomada unilateralmente por el ayuntamiento y la DGA, pero no tiene en cuenta las necesidades educativas de los niños y niñas", explica Melisa Martínez, del proyecto Marina.

La citada entidad solicita que se amplíe la escuela de Olba y que, mientras se lleva a cabo la reforma, se coloque un barracón, una solución para la que han surgido problemas técnicos.

Por ello se ha optado, por parte del consistorio, por utilizar las instalaciones municipales del barrio de Los Ramones.

Pero para la entidad Marina esa solución, aunque es temporal, supone "fragmentar" su proyecto, de ahí su insistencia en que se habiliten las escuelas de Olba y, como medida transitoria, se levante un barracón en un solar cercano de propiedad municipal.

No todo el mundo en Olba comparte ese punto de vista. "En realidad piden un colegio nuevo en la cabecera, cuando ya existe una escuela en Los Ramones, por lo que optan por la solución más costosa para el contribuyente", señala una vecina de la localidad que no pide no facilitar su identidad.