El cambio de postura del PSOE ha tumbado la propuesta inicial de reforma del reglamento de protocolo, que regula, entre otras cosas, la asistencia de los concejales a actos religiosos, y para la que el equipo de gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) solo ha conseguido el apoyo de Ciudadanos (C's).

A pesar de que en comisión la propuesta inicial fue apoyada por 19 de los 31 concejales, con el único voto en contra del PP y la abstención de CHA, que ve que esta reforma es "tibia" y "se queda corta", los socialistas han cambiado su voto al no ser aceptada por ningún otro grupo su enmienda que reclamaba "blindar" la Ofrenda de Flores y la festividad de San Valero.

Del mismo modo, los aragonesistas también han virado de la abstención al voto negativo al haber sido aprobada solo una de sus dos enmiendas, en la que pedían evitar la discrecionalidad del alcalde a la hora de decidir a qué actos religiosos se permita acudir a la corporación municipal y que ha sido la única aprobada de las cuatro presentadas por CHA, PSOE y PP.

Después de lamentar que no había visto plenos con "tan poca chicha" como el de hoy, el edil socialista Roberto Fernández ha criticado que el texto final no recoge lo que su grupo pretendía en la negociación y ha afirmado que no pretende que se acuda a los actos religiosos "por mayoría y en fila", sino simplemente preservar la Ofrenda y San Valero.

Así, ha defendido pasar de la obligatoriedad actual a la voluntariedad y, aunque no quiere que los concejales "vayan a misa" sí que "puedan ir" como miembros de la corporación, y ha recordado que la aconfesionalidad recogida por la Constitución no prohíbe a los regidores asistir a sus fiestas patronales.

Por último, ha reclamado que lleguen al pleno asuntos importantes y de gestión para que se vea que el gobierno de la ciudad "ha hecho algo".

Leticia Crespo (CHA) ha afeado su actitud tanto al PSOE, al considerar que han cambiado de postura desde la última campaña electoral y por intentar blindar la parte más religiosa de los actos, como a ZeC y a su portavoz, Elena Giner, por estar de acuerdo con ellos pero proponer un texto que no cree que avance en cuanto a la laicidad.

En sus intervenciones, Patricia Cavero, del PP, ha reiterado que ZeC quiere "prohibir" a sus concejales la presencia en actos religiosos por "prejuicios" ideológicos.

Unos actos religiosos que, "le guste o no" -dirigiéndose a Pedro Santisteve, a quien ha recordado que es "el alcalde de todos"- "forman parte esencial de las fiestas de esta ciudad".

El primer edil le ha contestado con una cita del Papa Francisco en la que decía que "la convivencia entre las diferentes religiones se ve favorecida por la laicidad del Estado".

Sin embargo, a Cavero le parece un "grave error" no participar en los actos festivos de la ciudad en los que toman parte los vecinos de forma "masiva" y ha criticado "falta de transparencia" y unilateralidad en el proceso.

La portavoz del grupo que gobierna la capital aragonesa, Elena Giner, ha insistido en que este "no es el dictamen de ZeC", sino el recogido en la comisión con las aportaciones de otros grupos y ha justificado precisamente en ese consenso su rechazo a las enmiendas de populares, socialistas y nacionalistas.

Tras reconocer que el presentado era el consenso "posible", ha señalado que se trata de asunto "delicado" y que "merecía este debate".

Alberto Casañal (C's) ha manifestado que no es verdad que pretendan prohibir, ha criticado al PP por querer incorporar actos estrictamente religiosos como el Rosario de Cristal y ha defendido que la presencia de la corporación quede reducida a los actos organizados por el propio Ayuntamiento, es decir, fiestas del Pilar y San Valero.

Asimismo, ha reiterado que son un partido "laico" y con "las ideas muy claras", además de defender la libertad para asistir individualmente a cualesquiera actos.