El Ayuntamiento de Ayerbe ha concluido la primera fase de las obras para renovar el tejado de la ermita de San Pablo, que tuvo que cerrarse por seguridad el año pasado después de que se derrumbara una parte de la cubierta. Esta actuación de urgencia en la parte más afectada, en la que el consistorio ha invertido 8.000 euros, permitirá que este domingo se pueda celebrar en el interior la misa de la tradicional romería en honor al santo.

De momento, el templo solo se reabrirá para este acto, a la espera de que continúen los trabajos de rehabilitación. Todavía serán necesarias otras tres fases de obras para recuperar por completo el tejado del inmueble, explicó el alcalde, Antonio Biescas.

El presupuesto total estará entre los 32.000 y los 34.000 euros, detalló, y la previsión municipal es ejecutar las sucesivas fases entre el 2020 y el 2021, una vez que se haya actuado en el tramo que sufrió el desprendimiento, «que era lo que urgía para poder celebrar la misa en la ermita».

Las primeras noticias documentales que se tienen de esta ermita (construida en sillarejo, salvo la fachada, de piedra sillar) son de 1618, pero ambas existían con anterioridad. Ya en 1814 hubo que desmontar el tejado para solventar el problema de las goteras.

La romería al templo se celebra el último domingo de enero, pero los actos en honor a San Pablo comienzan hoy, a partir de las 19.00 horas, en la plaza Alta, donde se lanzará el chupinazo, se prenderá la hoguera y se repartirá panceta y vino. Las fiestas continúan mañana con un homenaje a la tercera edad y la presentación del libro Y sin embargo, te quiero, Huesca-Jaca, 125 años de una línea ferroviaria, de Julio Alvira Banzo. Una discomóvil en el SENPA pondrá el broche a la jornada en la que se conmemora la conversión de San Pablo.